Hola :D
Antes que nada, disculpa por haber tardado tanto en subir este capitulo. Tuve unos cuantos problemas con mi universidad, mi entorno de escritura y en un aspecto más personal, pero ahora ya todo se ha ido arreglando y he recuperado mi motivación para escribir :3
Este capitulo es más que nada de desarrollo de personaje ya que aún estoy adaptándome de vuelta a la escritura, por lo que otra disculpa en caso este cap sea menos agradable que de costumbre, prometo que tratare de mejorar en los próximos
Además, aunque tratare de mantener mi escritura constante, aviso que los capítulos tardaran un poco más de lo normal en ser subidos ya que tengo menos tiempo libre y quiero tratar de mantener una buena calidad en la historia y demás
Aparte de eso... espero que disfruten el capitulo :D *Inserte gatito feliz*
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- A donde vamos? - preguntó Alpha mientras su mirada vagaba a través de sus alrededores en busca del desconocido objetivo al cual era guiada por su acompañante más reciente, el chico que previamente la había salvado de aquella maldición que la carcomía y que luego le explicó acerca de las verdades ocultas de este mundo
- Lo veras cuando lleguemos - comentó Cid con calma mientras sus manos se mantenían dentro de los bolsillos de su larga gabardina a la par que su cabellera se agitaba suavemente con la brisa que recorría el bosque por donde actualmente caminaban, ambos aún vestidos con sus trajes de slime pero con la particularidad que el chico había descartado su capucha junto al antifaz que previamente rodeaba sus ojos para permitir que Alpha tuviera una clara visión de su rostro
Apenas un par de horas habían pasado desde aquel momento en donde ambos habían realizado aquella promesa que los unía como compañeros en contra de aquellos que le habían arrebatado todo a la rubia, llevándola a perderse en sus pensamientos tras haber empezado a seguir al pelinegro en una dirección desconocida para ella
- Es... Extraño... - pensó la chica mientras que sus orbes azules se desviaban del verdoso camino frente a ella hacía el rostro de su acompañante, silenciosamente analizando las facciones masculinas pero infantiles que él poseía a la par que su ceño se fruncía levemente en profundo pensamiento
- Él dijo que su misión era acabar con los miembros del culto, por lo que intuí que inmediatamente empezaríamos a entrenar y pelear, pero... Parece muy calmado y tranquilo en lugar de preocupado o incluso ansioso al respecto... Ni siquiera parece tratar de apresurar esta caminata o incluso entrenarme en el camino... - pensó la chica a la par que su mirada empezaba a nadar a través de su entorno, silenciosamente tratando de hallar algún indicio de extrañeza en el lugar pero solamente pudiendo ver el entorno del bosque que, pese a la belleza que presentaba, solo consiguió generarle un leve malestar ante la aparente normalidad que había sin notar la forma en que el chico la miró de reojo al notar su cambio de expresión previo a volver su mirada al camino
Sin embargo, mientras los minutos pasaban y ambos seguían caminando, el chico a su lado finalmente detuvo su andar a la par que la audición de la chica captaba un leve atisbo de civilización a varias decenas de metros más adelante, una muestra de las ventajas naturales que tenía en sus sentidos al haber nacido como parte de la raza élfica
- Que ocurre? - quiso saber la rubia previo a que el pelinegro girase a verla para luego acercarse y observarla en silencio por unos leves segundos, cosa que generó que su cuerpo se tensara brevemente hasta que el chico tarareara suavemente
- No sería conveniente que vean tu verdadera apariencia, si alguno del culto te conocía previo a que sufrieras de la maldición, entonces eso solo serviría para alertarles sobre mis capacidades - murmuró el chico a la par que su mano derecha salía de su bolsillo previo a moverse hasta la parte superior de la cabeza de la chica, sorprendiéndola levemente cuando sintió que sus dedos se movían suave y lentamente sobre su cabellera en una caricia que, pese a lo repentina y extraña, brindo un suave confort en ella
Sin embargo, antes que la chica siquiera pudiese abrir sus labios para tratar de indagar sobre el actuar del pelinegro, un liquido negruzco pareció extenderse desde los dedos del chico previo a deslizarse a través de cada hebra de sus cabellos dorados a gran velocidad, rápidamente cubriéndolos previo a que su larga cabellera pareciera empezar a disminuir de tamaño mientras que su brillante color dorado empezaba a tintarse en un oscuro negro azabache, congelándola en su lugar mientras su mirada se detenía en las pocas hebras de su cabello que se balanceaban frente a su rostro a la par que sentía un suave peso posarse en la parte superior de su cabeza acompañando a una nueva prenda que rodeó su torso con mayor velocidad a la que siquiera pudo reaccionar
- ...Creo que eso es suficiente - comentó el chico con calma mientras su mano se movía de vuelta al bolsillo de su gabardina a la par que su traje parecía extenderse frente a ella, rápidamente formando una forma ovalada que reflejó su apariencia actual
Ahí, viéndola con grandes ojos azules llenos de sorpresa, la chica pudo notar la forma en que su cabellera previamente larga y dorada se había acortado para solamente llegar hasta sus hombros con aquel tono oscuro que pudo notar previamente, generándole una gran confusión al notar que sus oídos también habían sufrido una transformación inesperada al perder la longitud característica de su raza para luego tomar una forma más similar a la que el chico poseía a la vez que su cuerpo ahora se veía cubierto por una gabardina oscura similar a la que el chico traía mientras que su rostro era sombreado por una capucha que parecía fija en su lugar sobre su cabeza, ocultando gran parte de sus características faciales y solamente permitiendo una clara visión sobre sus pequeños labios rosáceos y parte de sus suaves mejillas
- No he cambiado tu apariencia de manera permanente, si eso es lo que te preguntas - comentó el chico con voz calmada a la par que el espejo improvisado frente a ella volvía a retraerse al traje de él, permitiendo que la chica centrara su mirada en los ojos oscuros del pelinegro - solo es un pequeño truco de ocultación... Tu cabello y oídos siguen teniendo la misma apariencia que siempre, pero han sido cubiertos por una pequeña capa del mismo material con el cual esta hecho nuestros trajes para ocultar parte de tus características naturales - explicó con calma previo a mover ligeramente su cabeza para indicar la nueva prenda que cubría el cuerpo de la rubia disfrazada - la ropa también es un camuflaje para evitar una vista clara a tu rostro y complexión, pero deberías ser capaz de volver a tu apariencia normal con una leve ráfaga de mana hacía el traje - añadió de manera informativa previo a girar y encarar nuevamente el camino que previamente habían estado recorriendo
Siguiendo al chico rápidamente tras una breve prueba en la que corroboró que su imagen volvía a la normalidad al permitir que una pequeña parte de su mana escapara de su cuerpo, Alpha pronto camino junto al chico a la par que los sonidos de la civilización se hacían cada vez más notorios, finalmente revelándose su procedencia tras cruzar un grupo de arboles particularmente densos que pronto dieron paso a la luz solar, cegándola por unos leves segundos previo a que su visión se adaptara a la situación para permitir que viera la ubicación frente a ella
Ahí, a varios metros de distancia, la chica pudo ver a una gran cantidad de personas recorriendo unas calles de suelo cubierto con ladrillos de piedra caliza brillante que demostraba el extremo cuidado que los ciudadanos tenían con el entorno en el que vivían, siendo que cada lado de la calle mostraba un grupo de 5 casas de 2 pisos en promedio previo a tener un cruce que llevaría a otras ubicaciones del lugar, llamando la atención de la menor que distraídamente se preguntaba que tan grande era aquel pueblo mientras continuaba siguiendo al pelinegro que, sin que ella lo notara, había vuelto a portar el traje que inicialmente había mostrado cuando ella despertó
Mientras andaban, la chica pudo notar la forma en la que el comportamiento tranquilo de Cid repentinamente había cambiado a uno más amigable e incluso infantil mientras saludaba a varios de los transeúntes que por ahí cruzaban, confundiéndola de sobremanera ante el actuar del chico previo a que el mismo le diera una rápida mirada calmada que le permitió reconocer la falsedad tras el actuar infantil del pelinegro
No obstante, antes de siquiera poder indagar sobre la razón en torno al actuar de su acompañante, la atención de la rubia pronto se vio atraída por una gran muralla rocosa que parecía tener unos 7 metros de alto a la par que se mostraba un agujero en forma de arco para dar paso al camino que ambos habían estado siguiendo, permitiendo que ambos entrasen calmadamente tras un breve saludo por parte del pelinegro hacía los guardias que cubrían la entrada, cosa que permitió que la chica reconociera el estado del pelinegro como alguien de aparente importancia en aquel pueblo
Al cruzar la entrada la visión de la chica inmediatamente se vio expuesta a un gran jardín de varios metros de longitud previo a dar paso a una gran mansión de 2 pisos hecha de un material similar al mármol en gran parte de la estructura junto a madera oscura colocada en el suelo y como saliente de las ventanas que se hallaban por el lugar, teniendo como particularidad a un gran grupo de personas actualmente de pie al lado derecho del jardín mientras balanceaban espadas plateadas con mango hecho de madera clara
Sin embargo, antes que la chica pudiese seguir con su investigación silenciosa, una suave voz infantil ligeramente femenina llamó su atención de manera casi inmediata - Cid? Quien es ella? - habló en un tono curioso que parecía cargar un sentimiento oculto que la rubia fue incapaz de reconocer
Girando su rostro encapuchado, Alpha rápidamente reconoció a la hablante como a una chica de piel lechosa que actualmente se encontraba parada bajo la entrada a la mansión a pocos metros frente a ella mientras que sus pupilas rojizas parecían vagar entre ella y su acompañante a la par que sus pequeños labios rosáceos se encontraban ligeramente abiertos tras sus palabras, mostrando un leve atisbo a sus blanquecinos dientes mientras que sus femeninas cejas afiladas se fruncían levemente en una muestra de confusión notoria, complementando su apariencia con largas pestañas de color negro que combinaban con sus cejas y con su larga cabellera sedosa que caía por su espalda hasta la parte medía de la misma además de tener una pequeña nariz recta posicionada entre medias de sus mejillas ligeramente rosadas que mostraban poca grasa de bebé a causa de sus entrenamientos, en general aparentando tener entre 10 y 11 años de edad
A su vez la chica actualmente se encontraba vestida con una sencilla camisa de color blanco que mostraba una ligera curvatura a la altura del pecho para mostrar la maduración que la chica estaba consiguiendo a la par que utilizaba unos pantalones cortos de color negro en su parte inferior para una movilidad aún mayor, mostrando sus largos brazos delgados a la par que parte de sus piernas ligeramente torneadas por su entrenamiento constante mientras sus pies se encontraban ocultos por un par de zapatos negros que claramente se centraban en la comodidad en lugar de la apariencia, todo esto haciendo que Alpha distraídamente reconociera que la chica probablemente crecería para ser una mujer de apariencia atractiva y curvilínea
No obstante, su introspección nuevamente se vio detenida cuando su acompañante actual abrió sus labios y tranquilamente habló - Claire - saludó con un ligero asentimiento a la par que sus labios mostraban una leve sonrisa más real en comparación con las que previamente había estado mostrando a los pueblerinos que habían visto antes, permitiendo que Alpha reconociera el aparente cariño que el chico tenía por la pelinegra frente a ambos - ella es Angelia, es una amiga que será mi criada personal a partir de ahora - comentó el chico mientras hacía un ademán hacía la rubia encapuchada, confundiéndola durante un breve segundo previo a reconocer la mentira que el chico parecía estar llevando a cabo para ocultar su verdadera identidad y labor
No obstante aquella respuesta pareció servir únicamente para generar más intriga en la pelinegra frente a ambos a la par que cruzaba sus brazos y alzaba una ceja, mirando fijamente al pelinegro en todo momento - Criada personal? Sé que nuestros padres nos han dado permiso para contratar a una si es que lo vemos necesario, pero es la primera vez que mencionas ese tipo de pensamiento... - señalo la chica mientras sus ojos se entrecerraban analíticamente hacía el chico, emanando una presión que inmediatamente tensó el cuerpo de Alpha en preparación para una pelea o un escape en caso de ser necesario
Pero, como si aquella mirada amenazante fuera incluso adorable desde su punto de vista, el chico solo soltó una suave risilla a la par que se encogía de hombros, en todo momento manteniendo su mirada fija en los ojos rojizos de Claire - Que no mencione algo no significa que no lo piense - señaló con calma, en todo momento manteniendo su cuerpo relajado en una muestra de tranquilidad que silenciosamente sorprendió a la rubia ante la calma mostrada incluso bajo la silenciosa intimidación de Claire
Ante la respuesta del chico, un silencio pronto se asentó en el lugar durante unos largos segundos previo a que la pelinegra suspirase antes de encogerse de hombros tranquilamente, silenciosamente caminando hacía ellos antes de detenerse frente a Alpha - Un gusto en conocerte, Angelia, como habrás oído previamente me llamo Claire, espero que podamos llevarnos bien y que el torpe de mi hermano no te cause tantos problemas - comentó con una leve sonrisa que solo creció cuando el pelinegro soltó un suave quejido de indignación ante la cualidad que se le fue señalada
No obstante, pese a que la situación era un claro intento que buscaba disminuir la tensión de la chica, Alpha fue incapaz de responder de ninguna manera a excepción de dar un simple asentimiento silencioso que llenó el ambiente con un incomodo silencio que pronto Cid se vio obligado a cubrir con una suave tos fingida que llamó la atención de las féminas presentes
- Voy a mostrar su habitación a Angelia, quizás luego te alcance para una practica o algo - comentó a la chica pelinegra que pronto asintió previo a retirarse del lugar con dirección al grupo de caballeros que habían estado practicando durante todo el suceso
Una vez más quedando en la compañía única del otro, Cid silenciosamente guió el camino para que ambos se adentrasen en la mansión para luego llevarla directamente al segundo piso y a través de un largo pasillo donde solo sus pasos resonaban suavemente, finalmente deteniéndose frente a una puerta de madera que el chico abrió para luego hacerle una seña para que ingresara
Al entrar, la chica inmediatamente fue capaz de notar una larga cama posicionada en contra de la pared izquierda de la habitación mientras que una mesa de noche hecha con madera oscura se posicionaba en la zona derecha de la cama para facilitar el alcance para cualquiera que descansara en aquel lugar, teniendo una ventana posicionada justo en dirección diagonal derecha superior de la mesa de noche
Por otro lado, en el lado opuesto de la habitación se mostraba un gran ropero hecho de madera ligeramente más clara en comparación con la de la mesa de noche, actualmente cerrada pero aparentemente conteniendo varias prendas y calzados de pertenencia actualmente desconocida para la chica
Sin embargo, como si notara la confusión que lentamente asaltaba su mente, Cid tranquilamente se adentró en la habitación tras cerrar la puerta tras de si, permitiendo que ambos tuvieran una mayor privacidad a la par que la chica volvía a su apariencia normal mientras el chico hablaba con calma - esta es mi habitación, a partir de ahora la compartiremos para que así pueda monitorear tu progreso general además de corroborar que no arruines tu entrenamiento al hacer más de lo que te indique - explicó antes de levantar una mano en dirección hacía ella para interrumpir cualquier tipo de comentario que pudiese llegar a tener - obviamente esto no significa que dormiré en la cama junto a ti o que invadiré tu privacidad constantemente, en los aspectos de horario de sueño soy perfectamente capaz de hallar una solución que no cause molestias a ninguno de los dos y en caso de querer privacidad de algún tipo, simplemente debes pedirla - añadió antes de señalar al ropero
- Respecto a las prendas, puedes pedir cualquier tipo de atuendo que desees, pero el traje que actualmente portas posee cualidades que permiten una imitación a cualquier prenda que imagines, por lo que puedes cambiarte sin la necesidad de comprar las prendas - explicó antes de alzar una ceja hacía ella - alguna pregunta? - indagó solo para conseguir un leve asentimiento dudoso por parte de la chica
- No vamos a entrenar aún? - indagó suavemente, su mirada fija en los oscuros ojos del chico frente a ella solo para notar un leve atisbo de preocupación que rápidamente pareció desaparecer como si de una simple ilusión se tratase
- Hoy no - respondió el chico con un leve negar de cabeza antes de volver a centrar su mirada en ella - tu mana aún parece ligeramente inestable y yo debo crear un plan de entrenamiento para ti, por lo que hoy será un día de descanso - explicó ante lo que la chica asintió con leve renuencia notoria en sus orbes azulinas sin notar la mentira que el chico acababa de anunciar mientras su mirada parecía analizarla durante un leve segundo
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- Mamá! - fue el grito que escapó de sus labios a la par que sus pasos detenían la carrera que previamente había estado realizando, permitiendo que su mente reconociera el ardor muscular en sus piernas mientras que sus labios se sentían resecos debido a los constantes jadeos que constantemente liberaba en una muestra del agotamiento que la asaltaba
Sin embargo, todo esto fue ignorado por la chica a la par que su mirada llorosa se fijaba en la imagen frente a ella luego de haber girado su cuerpo para encarar la situación, pudiendo notar con claridad una figura femenina de larga cabellera rubia-platinada que actualmente le daba la espalda mientras sus hombros se movían de arriba hacía abajo con cada respiración agitada que tomaba en acompañamiento a sus propios gruñidos cansados como producto de su actuar actual
Ahí, frente a la mujer, una gran cantidad de personas la veían con ojos acusadores mientras que todos llevaban armas de variada apariencia, algunos portando espadas largas bastante comunes mientras que otros parecían llevar espadas curvas que parecían reflectar la luz del sol de manera molesta para la mujer que enfrentaban y que portaba una simple espada común
- Deja de proteger a tu hija... La maldición ya la ha consumido, lo que estas haciendo solo sirve para extender su dolor... - gruño un hombre de apariencia sorprendentemente atractiva, teniendo una larga cabellera rubia junto a unos afilados ojos verdosos que parecieron enfocarse en la mujer por un breve segundo previo a ir más allá, centrándose en la chica que actualmente jadeaba con agotamiento
Ante sus palabras, la mujer no reaccionó en absoluto durante unos breves segundos en los que el silencio fue cubierto por el suave susurrar de los arboles acompañado de los jadeos que la niña tras de ella liberaba constantemente
Sin embargo, tras unos leves momentos que parecieron durar una eternidad para todos los presentes, la mujer solo soltó un suspiro previo a girar su rostro a la izquierda para ver por encima de su hombro a la infante tras ella, sonriéndole con cariño maternal que concordaba con el sobrenombre que la chica previamente había gritado - corre cariño... Corre y no mires atrás, no importa lo que escuches - habló con una suave voz melodiosa y casi angelical cargada con una cantidad incontable de sentimientos encontrados por la situación actual, siendo el predominante un claro amor y ternura por la chica tras de si
- Pero... - quiso contradecir la menor solo para retener un escalofrío a la par que su madre le daba una mirada ligeramente más afilada que pronto dirigió a las personas frente a ella
- He dicho que corras... Ahora - ordenó con una voz mucho más dominante y afilada en comparación a la anterior, congelando a todos los presentes y haciendo que los orbes azules de la chica empezaran a derramar las lagrimas que previamente había estado reteniendo
- Ma... -
- Corre! - interrumpió la mayor a la par que el grupo frente a ella se lanzaba al ataque a velocidades irreconocibles por la menor, congelándola pero inmediatamente haciendo que su cuerpo obedeciera las ordenes de la mayor en busca de escapar de aquella situación
- Mamá! - llamó a gritos a la par que metal contra metal se oía tras ella, gritos de batalla resonando en la tranquilidad del bosque a la par que sus pequeñas piernas se movían a la máxima velocidad que podían para escapar del lugar
- Mamá! - llamó de nuevo, ignorando por completo la forma en que sus piernas ardían de dolor por la incesante carrera que había tomado a la par que su garganta se volvía rasposa por la falta de aire que le generó sus constantes gritos y movimientos, acompañando a la perfección el ardor insoportable en su pecho tanto por la situación en la que se encontraba como por el bulto rojizo-negruzco que había empezado a crecer sobre su piel
- Mamá! - gritó Alpha a la par que rápidamente se levantaba a una posición sentada en la cama de manera abrupta e incontrolable, su mente aún atrapada en la pesadilla que acababa de sufrir mientras que sus ojos derramaban lagrimas incesantes que surcaron sobre la superficie de sus tiernas mejillas
- Mamá! - llamó nuevamente a la par que sus brazos se extendían en busca de aquella mujer que alguna vez la había protegido, solamente pudiendo alcanzar el aire vacío de la oscura habitación en la que se encontraba previo a sentir que sus manos finalmente encontraban algo de lo que sostenerse, inmediatamente haciéndolo mientras sus labios continuaban llamando a su progenitora
- Tranquila... Estarás bien... Estoy aquí... - susurró una voz en su oído derecho a la par que sentía unos pequeños pero fuertes brazos rodeando sus hombros y atrayéndola a un suave, pero apretado, abrazo en donde su rostro terminó ocultándose contra lo que parecía ser una camiseta, permitiendo que sus lloriqueos fueran ligeramente ahogados en contra de la tela mientras que su espalda era objetivo de unas suaves caricias que eran copiadas en la parte trasera de su cabeza, demostrando un cuidado que solamente sirvió para que sus lagrimas cayesen con mayor fuerza mientras sus gritos se hacían más y más débiles con cada momento que pasaba
Finalmente, tras lo que parecieron varias horas pero en realidad fueron meros minutos, la mente de la chica pareció recuperar el suficiente raciocinio como para volver a la realidad que actualmente la rodeaba, permitiendo que alejara suavemente su rostro del pecho donde había estado llorando previo a levantar la mirada en silencio para descubrir quien era el responsable de su vuelta a la calma
Al apartarse lo suficiente, los azules ojos de la chica inmediatamente se hallaron con un par negruzco que ella reconoció a la perfección pese al poco tiempo que habían pasado juntos, irremediablemente haciendo que su mirada vagara levemente a la desordenada cabellera oscura del chico que demostraba claras señales de apenas despertar
- Mejor? - le susurró el chico mientras que Alpha notaba la forma en la que su espalda y la parte trasera de su cabeza seguían siendo acariciadas suave y lentamente por parte del chico, brindándole un confort que, si bien no fue capaz de eliminar su tristeza por completo, fue capaz de amainar la turbulencia en su corazón que actualmente amenazaba con llevarla a otra sesión de lagrimas y gritos desesperados
- Y...yo.... Lo siento... - susurró mientras trataba de apartarse del abrazo del chico solo para ser sorprendida cuando él apretó sus brazos levemente y mantuvo su actuar con calma
- No debes disculparte... Solo... Tomate todo el tiempo que necesites - le susurró Cid mientras que Alpha solamente era capaz de mantener su mirada fija en los ojos negruzcos del chico previo a asentir suavemente para luego inclinarse nuevamente en contra del pecho del mismo, permitiendo que sus propios brazos serpentearan alrededor del torso de Cid para tratar de mitigar cualquier remanente de tristeza y pavor que aún asaltaba su frágil estado mental
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Respiraciones agitadas y temblorosas escapaban de sus labios de manera incesante y notoriamente cansada, llenando el silencio de su verdoso entorno actual mientras que sus pasos se mantenían lo más silenciosos posible a la par que veloces para mantener su rápida carrera en donde su mirada se movía fugazmente a cada rincón de su entorno en busca de algún posible peligro inminente que el resto de sus afilados sentidos fueran incapaces de reconocer de manera previa
Inclinándose ligeramente hacía delante para tratar de ganar una mayor velocidad a la par que ajustaba su centro de gravedad al desequilibrado camino terroso por el que corría, sus afilados oídos temblaron ligeramente al captar un suave crujir previo a que sus ojos se abriesen con sorpresa a la par que un grueso árbol de metros de altura repentinamente empezara a caer a pocos metros frente a ella, generándole un suave gruñido de molestia que fue ahogado suavemente gracias al ruido de las aves temerosas que escaparon del lugar a la par que su pierna izquierda se movía a gran velocidad para dar un fuerte pisotón que utilizó para cambiar su dirección de manera súbita a la par que creaba una leve pantalla de tierra frente a ella para bloquear la visión del responsable de aquella destrucción
Sin embargo, como si su perseguidor hubiera predicho aquella acción, sus ojos solo pudieron abrirse con sorpresa y horror a la par que una pequeña cuchilla oscura aparecía a meros centímetros de su rostro sin indicación alguna que hubiera revelado la existencia del objeto, burlándose del orgullo que ella tenía ante sus afilados sentidos raciales y obligando a que sus ojos se cerraran fuertemente en un pánico instintivo ante el preludio de lo que parecía ser una muerte segura
No obstante, y contrariando el dolor esperado, una suave presión se posó en la parte superior de su cabeza previo a dar suaves caricias a su sedosa cabellera dorada de manera lenta y cuidadosa como si tratara de calmar su agitado corazón, permitiendo que abriera sus ojos de manera lenta y dubitativa tras unos breves segundos para finalmente reconocer al responsable de aquel actuar
Ahí, parado frente a ella mientras su cuerpo se mantenía erguido y su mano derecha se mantenía estirada para acariciarla, un chico vestido en túnicas tintadas en el negro más oscuro y decorado con franjas doradas se mantuvo mirándola con afilados ojos carmesíes brillantes mientras sus labios formaban una leve sonrisa calmante que parecía contener un leve atisbo de diversión notoria
- lo hiciste bien... Sin embargo, recuerda que siempre debes mantenerte completamente alerta, nunca sabes que tipo de ataque tendrán tus oponentes, por lo que no sabrás si pueden ignorar tus sentidos de la misma forma en la que acabo de hacerlo - comentó el chico con una voz profunda y melodiosa que contrastaba la apariencia infantil que él ocultaba bajo sus ropas
Oyendo las palabras del chico y cortando el flujo de mana que había estado surcando a través de su piel para poder mantenerla al día con las capacidades del oji-rojo frente a ella, su cuerpo pareció finalmente rendirse por completo a la par que sus rodillas empezaban a temblar suavemente por el ardor que empezó a recorrer cada pequeño centímetro de los músculos de su cuerpo, obligándola a caer hacía delante por el sumo cansancio y dolor previo a que sus hombros fueran suavemente sostenidos por el chico frente a ella para ayudarla a mantenerse de pie
- Lo... Lamento.... - susurró ella tras sentir el agarre del chico a la par que trataba poner un atisbo de fuerza en su cansado cuerpo en busca de alejarse del toque del pelinegro para evitarle molestias, inevitablemente haciendo una mueca de dolor cuando sus piernas parecieron protestar fuertemente ante su actuar al causarle más ardor a lo largo de sus muslos y pantorrillas
No obstante, y demostrando una vez más una gran cantidad de amabilidad que la rubia había empezado a asociar con su presencia, el chico solo rió suavemente previo a sorprenderla al moverla rápida y gentilmente para colocarla sobre su espalda, permitiendo que sus piernas se colocaran a cada lado de su cintura mientras que su pecho se presionaba suavemente contra la espalda ligeramente endurecida del oji-rojo, cargándola en lo que el chico alguna vez había llamado "Estilo Caballito"
- Tranquila - susurró el chico mientras que sus manos serpenteaban hacía atrás para sostener la parte trasera de sus muslos, manteniéndola en su posición actual y sutilmente empujándola de manera en que sus delgados brazos cubiertos por su oscuro body-suit se tuvieron que mover alrededor del cuello del chico antes de cruzarse por el pecho del mismo, abrazándolo y usándolo como soporte a la par que él empezaba a flotar lentamente - hemos estado 5 horas continuas entrenando, es entendible que seas casi incapaz de mantenerte en pie por tu cuenta, Alpha - tranquilizó
Escuchando las palabras del chico, Alpha solo atinó a suspirar para si misma a la par que se inclinaba para acunar su propio rostro contra el hombro derecho del chico, permitiendo que su sentido del olfato se viera asaltado por el suave aroma tranquilizante de canela que él emanaba a la par que sus propios pensamientos empezaban a distanciarse de la realidad actual mientras sus ojos se cerraban suavemente
- Ya ha pasado 1 mes... - pensó mientras que su mente recordaba el momento en que la maldición que asaltaba su cuerpo había sido eliminada gracias al pelinegro que actualmente la cargaba, habiendo decidido unirse a la organización que el chico creó en una muestra del agradecimiento que ella tenía hacía él junto al deseo de venganza que había generado en contra del culto de Diavolos, aquellos bastardos quienes le habían quitado todo lo que alguna vez había sido de ella
En aquel entonces, tras haber aceptado unirse a Shadow Garden, su mente había estado llena de un incesante deseo de sangre mientras esperaba ansiosamente por el momento en que el chico la llevara en una búsqueda donde pudiera acabar con aquellas personas que formaban parte de la oscura organización, constantemente teniéndola al borde de un ataque nervioso que apenas era capaz de contener al rememorar la historia de los 3 héroes mientras reemplazaba a los personajes con ella siendo la protagonista vencedora ante aquella batalla que Cid había declarado como cierta
Sin embargo, en lugar de ser participe de una gran cantidad de ataques en contra del culto de Diavolos o viviendo una intensa temporada de entrenamiento que afilara sus capacidades de lucha, la chica se había encontrado retenida en la seguridad de la mansión familiar del chico la mayor parte de su tiempo, solamente capaz de realizar un entrenamiento de control de mana en la habitación del pelinegro bajo sus indicaciones ocasionales o teniendo días en los que salía del lugar para una sesión de entrenamiento que se enfocaba unicamente en el escape y la supervivencia mientras el chico la sorprendía con ataques furtivos que siempre parecían amenazar su vida previo a ser detenidos en el momento exacto previo a una tragedia
Además, y como si quisiera empeorar los nervios y la furia creciente que se almacenaban en su cuerpo ante la impotencia y el deseo de venganza que su mente generaba, emociones que solo parecían incrementarse tras las noches llenas de pesadillas que vivía a diario solo para ser reconfortada por el pelinegro, el chico constantemente parecía enfrascarse en batallas nocturnas en contra de bandidos ligeramente relacionados con el culto, simplemente sabiendo aquella información debido a las diarias salidas que él realizaba mientras ella era dejada en la soledad de la oscura habitación del chico para que practicase algún tipo de régimen que el pelinegro decidiera por ella o, la mayor parte del tiempo, para su descanso
- Por que no me deja ir con él...? - pensó con molestia leve a la par que su rostro formaba una suave mueca que rápidamente trató de ocultar pese a tener su rostro en contra del hombro de Cid - Dijo que era su compañera, pero solo entreno a diario mientras él se enfrenta a los que me quitaron todo... - añadió mentalmente con incluso mayor molestia que la obligo a soltar un cansado suspiro previo a que su atención se viera inmediatamente atraída por la voz del chico
- Llegamos - comentó Cid con calma a la par que Alpha abría sus ojos solo para observar la habitación en la que se encontraban, rápidamente reconociéndola como la habitación perteneciente a la del chico que lentamente la volvía a posicionar sobre el suelo
- Venimos por algo en especifico o...? - preguntó Alpha suavemente mientras sus brazos rápidamente se movían para esconder sus manos tras su espalda, ocultando la forma en que sus dedos se cruzaron en una suplica silenciosa por que el chico comprendiese su deseo actual
Sin embargo, mientras el chico se giraba y la encaraba, Alpha inmediatamente pudo notar que su deseo no sería realizado cuando su pupilas azules se hallaron con las rojizas del chico que demostraban un leve atisbo de aparente confusión previo a encogerse de hombros
- Es tu hora de dormir, yo aún tengo cosas que hacer - declaró a la par que se movía para esquivarla sin aparentemente notar la decepción que inmediatamente asaltó su ser, haciendo que sus brazos cayesen lánguidamente a sus lados mientras que su cabeza bajaba para enfocar su mirada en el suelo
- Yo... Comprendo... - murmuró la rubia mientras que sus piernas se movían a paso lento y agotado en dirección a la única cama de la habitación, silenciosamente permitiendo que su cuerpo se inclinase previo a arrastrarse sobre las blanquecinas mantas sedosas que la cubrían para luego acostarse silenciosamente mientras que sus ojos se centraban en la pared opuesta a la ubicación del pelinegro, permitiendo que sus propias manos se movieran suavemente sobre la manta previo a cerrar sus dedos en un puño lleno de frustración que trató de contener
Sin embargo, sin que la chica lo notase, Cid giro su rostro para verla sobre el hombro izquierdo a la par que sus orbes carmesíes brillaban levemente de manera analítica mientras su expresión se mantenía tallada en una apatía congelante al ver la forma en la que la chica se mantuvo vestida con aquel traje de limo que le había otorgado tiempo atrás, soltando un suave suspiro previo a volver a encarar la ventana por la que previamente había ingresado para luego salir disparado del lugar con un suave agitar del aire
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Sin notar la forma en que su cuerpo reaccionaba, sus dientes se apretaron suavemente a la par que sus manos apretaban con fuerza ligeramente sobrecargada con su mana al marco de la ventana donde eran apoyadas, resquebrajando levemente la madera previamente impoluta a la par que sus ojos azulinos se mantenían fijos en la imagen que se mostraba tras la existencia de un transparente cristal
Ahí, en el jardín exterior de la mansión a la cual se había acostumbrado a habitar, su mirada fue capaz de captar la manera en la que un chico de cabellera pelinegra se deslizaba por debajo de un corte circular hecho por parte de una chica de larga cabellera con el mismo color que la de su homónimo masculino previo a rápidamente responder al ataque con una patada dirigida a la parte dorsal de la rodilla de la fémina, generándole un suave quejido de dolor ante la potencia del ataque previo a rápidamente reaccionar con una voltereta frontal para esquivar un ataque de persecución que el chico había tratado de atinar a su espalda desprotegida
Sin siquiera tomarse un segundo de descanso, la pelinegra inmediatamente hizo un barrido al suelo tras haber terminado su voltereta, utilizando aquella acción para crear una pequeña pantalla de humo que obstruyó la visión del chico el tiempo suficiente para que ella reforzara su cuerpo con una cantidad de mana mucho mayor a la que previamente había estado aplicando para luego salir disparada de su lugar en contra del chico que colocó su espada frente a él a modo de protección ante el corte vertical que se había avecinado
No obstante, el chico no pareció tener en cuenta aquel aumento en el mana de la pelinegra, razón por la que su cuerpo inevitablemente perdió su estabilidad previo a salir disparado de su lugar mientras que la chica lo perseguía sin darle un mero segundo para respirar
Derrapando por el verdoso césped, la mirada del chico pareció entrecerrarse por un breve segundo a la par que sus pupilas tan negras como el vacío cambiaban de color a un carmesí sangriento por un breve segundo previo a desaparecer, casi haciendo que la pelinegra lo tomara como una ilusión a la par que su espada se detenía a menos de 1 centímetro de distancia del cuello del chico
- Cedes? - fue el murmullo que escapó de los labios de la chica pelinegra y que fue fácilmente captado por su observante secreto a la par que el chico soltaba un suave suspiro de aparente renuencia y cansancio
- Sí, no puedo hacer mucho más en este caso, Claire... - murmuró el chico en respuesta solo para conseguir que la mencionada entrecerrara sus ojos hacía él en una muestra de la combinación de sentimientos que se habían acumulado en su interior, yendo desde el orgullo y la alegría ante la victoria que acababa de conseguir junto a un leve matiz de molestia combinada con una emoción conocida solo para ella misma ante la obvia mentira que el chico acababa de decir y la forma en la que pareció contenerse
- En serio? Entonces supongo que tus ojos cambiando a rojo por un segundo es solo un efecto estético, cierto? - indagó la pelinegra de manera casi burlona mientras observaba al chico de manera casi intimidante
No obstante, aquello solo fue recibido con una expresión de confusión por parte del chico, expresión que Alpha sabía que era falsa debido al conocimiento respecto al verdadero poder del chico, previo a abrir sus labios de manera casi dubitativa - ojos rojos? Claire, mis ojos siempre han sido negros... Estas bien? - cuestionó el chico en un tono de aparente inocencia que consiguió un suspiro resignado por parte de la chica
- Algún día sabré lo que ocultas... - murmuró la chica previo a que ambos parecieran caer en un súbito silencio que pronto fue roto por las palabras de la chica - si sabes que tu sirvienta nos ha estado observando todo este tiempo, cierto? - indagó a la par que los ojos de Alpha se abrían con extrema sorpresa previo a salir disparada del lugar, alejándose rápidamente de la ventana por donde había estado espiando todo el suceso y empezando a meditar en el centro de la habitación que compartía junto al chico
Sin embargo, si la chica se hubiera quedado más tiempo, hubiera notado la forma en la que Cid levantó su mirada y la fijó en la ventana donde previamente ella había estado, sus ojos negruzcos observando el lugar con una mirada analizadora y preocupada que ella fue incapaz de ver
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- Cuando podré enfrentar al culto? - fue la pregunta que finalmente escapó de los labios de la chica en un suave susurro, en todo momento manteniendo su mirada fija en la pared donde conectaba la cama donde actualmente estaba acostada a la par que la oscuridad de la habitación ocultaba su expresión
Ante sus palabras, el otro habitante de la habitación se mantuvo en silencio a la par que sus movimientos parecían detenerse de manera inmediata, congelandolo en lo que claramente era un intento de escape a través de la ventana abierta de su habitación mientras su cuerpo era totalmente cubierto por su traje oscuro representante de su alter-ego "Shadow", teniendo su pie derecha posicionada sobre el marco ligeramente destruido por el actuar temprano de la chica a la par que su cuerpo se encontraba ligeramente inclinado hacía delante en preparación para iniciar un vuelo rápido
Sin embargo, tras unos leves segundos en silencio el chico pareció recuperar el movimiento en su cuerpo a la par que sus labios se abrían bajo la oscuridad producida por la capucha de su traje - Aún no estas lista - fue la respuesta sencilla pero indeseada que otorgó
Al oírlo, un suave gruñido irremediablemente escapó de los labios de la rubia a la par que giraba en la cama para luego ponerse de pie con una gracia notoria previo a enfocar sus orbes azulinas en las oscuras del chico, mostrando una gran cantidad de molestia e ira a la par que se acercaba a él con paso rápido, finalmente deteniéndose cuando su rostro estuvo a meros centímetros de distancia del chico que mostraba una calma totalmente imperturbable mientras se movía para pararse rectamente frente a la chica
- Llevo 2 meses... 2 meses desde que me uní a ti, 2 meses desde que me prometiste que acabaríamos con el culto de Diavolos... 2 meses desde que espero poder acabar con los que me quitaron todo... - gruño la chica a la par que sus manos se cerraban en puños que trataban de contener toda su frustración y molestia de manera infructuosa
- Y en todo este tiempo que he hecho? Me la he pasado encerrada en esta habitación casi a diario, lo único que puedo hacer es sentarme en la cama y entrenar mi control de mana o entrenar esa estúpida practica de escape una o 2 veces por semana... - gruño a la par que su mana parecía finalmente reaccionar a su estado emocional actual de la misma forma en la que ocurrió horas atrás, generando que su cuerpo empezara a llenarse de poder mientras el chico era capaz de ver una etérea aura cerúlea rodeando su figura y permitiendo que sus ojos azules brillaran con poder amenazante
No obstante, pese a todo lo que la chica mostraba, la mirada del pelinegro se mantuvo sin fluctuaciones que afectaran a su calma actual mientras la veía en silencio que solo sirvió para enervar los nervios de la rubia frente a él, casi como si estuviera provocándola a reaccionar de manera más agresiva a la que estaba mostrando
Pero, antes que la chica siquiera pudiera pensar en alguna respuesta, su mente inmediatamente pareció congelarse a la vez que la mano izquierda del chico se deslizaba hacía ella y abrazaba su cintura previo a que ambos salieran disparados del lugar a velocidades que entumecieron el cuerpo y la mente de la rubia que solo era capaz de ver un borrón en representación a su ubicación cambiante
Con la misma velocidad con la que su viaje inicio fue con la que terminó, dejándola jadeando con el cuerpo encorvado y las manos presionadas en contra de sus piernas a la par que ambos se detenían con una estruendosa explosión sónica mientras que la visión de la chica trataba de adaptarse a su entorno actual debido a la confusión mental que aún poseía por las grandes velocidades con las que acababan de viajar, finalmente pudiendo lograrlo tras unos largos segundos donde su audición era capaz de captar una gran cantidad de pasos acercándose a su posición mientras ella reconocía lo que parecía ser la entrada a una cueva tenuemente iluminada por unas cuantas antorchas que demostraban la presencia de habitantes
- Querías acabar con miembros del culto? Bien, hazlo - fueron las simples palabras que alcanzaron sus sentidos y que llamaron su atención para hacer que girara su mirada hacía el chico que la había traído hasta ahí, solo pudiendo congelarse cuando el pelinegro se desdibujó de su visión y desapareció inmediatamente del alcance de cualquiera de sus sentidos
Antes de siquiera poder pensar correctamente acerca de lo que estaba ocurriendo, el sonido de pasos resonó con mayor fuerza previo a revelarse como una gran cantidad de personas vestidas con armaduras de cuero polvorientas y rasgadas junto a espadas ligeramente astilladas que demostraban la falta de cuidado por parte de sus cautos portadores que observaban frenéticamente alrededor del lugar en busca del causante de aquella explosión sónica que previamente había tomado lugar
No obstante, en el momento en que sus miradas se centraron en la pequeña figura aparentemente frágil y vulnerable de la chica, los ojos de todos los presentes mostraron una gran cantidad de confusión y duda ante la vista inesperada que captaron, inevitablemente haciendo que se mantuvieran en sus lugares con duda en torno al procedimiento que deberían tomar
- Una mocosa...? - murmuró una voz masculina proveniente de uno de los bandidos más cercanos previo a negar la cabeza suavemente para borrar aquellos pensamientos aparentemente inútiles - No sabemos que hizo esa explosión, pero tengan cuida... - habló en voz alta, claramente tratando de alertar a sus compañeros para evitar cualquier tipo de error cometido en un momento de extrema confianza
Sin embargo ninguno de los presentes había esperado que Alpha en realidad no fuera la chica indefensa que su apariencia infantil sugería, razón por la cual ninguno pudo prevenir que la chica se moviera a grandes velocidades en dirección al bandido hablante mientras su traje se extendía desde su palma izquierda para formar una oscura espada negro azabache que pronto se encontró atravesando el pecho del sorprendido hombre que solo pudo soltar pocas palabras de confusión ahogadas por la sangre que rápidamente se acumuló en su garganta
Sin siquiera dudar por un segundo y sin darle importancia al hombre moribundo frente a ella, la rubia rápidamente aprovecho la leve sorpresa generada por su ataque para bombear mana a través de todo su cuerpo mientras que su mente se apagaba para permitir que su cuerpo tomase el control con practica generada gracias al entrenamiento que tuvo previo al desastre que la asaltó, velozmente alejándose del dañado bandido que solo pudo caer al suelo de rodillas mientras ella giraba su cuerpo a la derecha para luego aprovechar su baja estatura para dar un corte circular que logró atravesar las piernas de otro bandido con sorprendente facilidad, amputándole ambas extremidades y haciendo que gritos de dolor se escaparan de sus labios ante el absurdo dolor que lo asaltó
Como si los gritos del hombre finalmente hubieran despertado sus aturdidas mentes, ninguno de los bandidos tardo siquiera un segundo previo a lanzarse en contra de la rubia mientras que sus ojos mostraban una sensación intensa de ira ante la muerte de uno de sus compañeros y la grave herida en otro
Con los ojos abiertos ante el movimiento veloz que tuvieron todos los presentes, Alpha solamente pudo soltar un quejido tras haber colocado su espada frente a ella como escudo ante una estocada entrante previo a sentir una poderosa patada en su flanco izquierdo que obligó a que sus labios se abrieran en un grito silencioso de dolor a la par que salía disparada a través de la dura tierra circundante
No obstante, al tratar de levantarse rápidamente del golpe que recibió a la par que contenía las lagrimas en sus ojos con la intención de ponerse en guardia lo más pronto posible, la chica solamente pudo abrir los ojos con pavor en respuesta a un rodillazo que pronto aterrizo en su rostro, aturdiéndola y dejándola totalmente desprotegida ante el agarre inverso que alguien atinó en el cuello de su body-slime suit para luego enviarla en una parábola directo a otro bandido que atinó un fuerte puñetazo directo en su espalda, quitándole el aire y haciendo que saliese disparada directamente en contra de un árbol que solo tembló suavemente ante el poderoso choque que rompió un par de costillas en la chica
Cayendo al suelo tras el golpe, Alpha solamente pudo temblar lastimosamente en el suelo a la par que su mirada desenfocada vagaba inconscientemente por sus alrededores mientras que sus labios se abrían y cerraban en busca de una leve cantidad de aire que pudiese enfriar el ardor en sus pulmones tras la fuerte paliza que acababa de recibir, solamente consiguiendo un aumento en su dolor debido a lo que pareció ser una herida que afectó a sus pulmones
- Ah... Ya veo... - pensó distraídamente mientras su audición era capaz de captar unos pasos acercándose a ella, cosa que ella ignoró en su estado de aturdimiento actual - Por eso decía que no estaba lista... Sigo siendo la misma debilucha... Sigo siendo la misma que solo pudo correr cuando su madre se enfrentó a todos para salvarla... Sigo siendo la misma que solo pudo llorar y temblar mientras se convertía en un monstruo... Y sigo siendo la misma que solo pudo quedarse quieta y pensaba en el culto de Diavolos mientras su salvador se encargaba de acabar con ellos... - pensó de manera autocritica a la par que lentamente se arrastraba por la tierra, cada centímetro de su ser rogándole que se detuviera por un descanso que pronto llegó cuando la chica rodó lentamente y se permitió sentarse en el suelo con la espalda en contra del árbol que previamente había golpeado
Debido a su nueva posición, la mirada nublada de la chica irremediablemente se fijó en el grupo de bandidos que lentamente se estaban acercando a ella con expresiones de satisfacción en sus rostros, probablemente debido a la humillación que le habían dado en retribución al daño que había realizado en sus otros 2 compañeros
No obstante, a diferencia de momentos anteriores donde ella hubiera estado llena de ira y deseos de venganza en contra del grupo que seguramente pertenecían al culto de Diavolos en base al comentario que dio Cid momentos antes de desaparecer, Alpha ignoró con extrema facilidad al grupo que se acercaba a ella a la par que levantaba su rostro para observar lo que se hallaba sobre ella
Al hacerlo, una profunda inhalación se oyó a la par que la mirada de la chica se mantenía fija en las frondosas copas de los arboles cuyas hojas danzaban suavemente al compás del suave viento que circulaba por la zona, permitiendo que su mirada se encontrara con un pequeño agujero que le permitió una clara visión del cielo estrellado acompañado con la blanquecina luna llena que la iluminaba levemente con su luz, entumeciendo su mente momentáneamente y generando en ella, sin saberlo, una pequeña sonrisa
- Hermoso... - susurró inconscientemente a la par que una espada parecía empezar a caer sobre ella con la intención de acabar con su vida finalmente, obligándola a lentamente cerrar sus ojos con su suave sonrisa aún presente
Sin embargo, en lugar del dolor o la inconsciencia que esperaba, lo único que sus sentidos entumecidos fueron capaces de captar fueron una serie de gritos llenos de sorpresa que pronto se turnaron en horror y desesperación, generando en ella una curiosidad que no dudó en saciar casi al instante
Al abrir sus ojos una vez más tras lo que fueron poco menos de unos 20 segundos, la respiración de Alpha pareció detenerse de inmediato a la par que su mirada se encontraba con unos orbes carmesíes que la miraban con una calma que casi parecía alcanzar niveles de apatía extrema que combinaban con la expresión neutra que su portador mantenía, clara incluso bajo la ocultación de las sombras producidas por su oscura capucha y su antifaz negro
Tras él solo había lo que la chica podría describir como una escena de terror que, pese a lo grotesco y visceral que se veía, no generó en ella ningún tipo de respuesta negativa más allá de una leve sorpresa ante lo que parecía ser un río de sangre cubierto por brazos y piernas desmembrados que conducían directamente al chico arrodillado frente a ella mientras que podía notar algunos cuerpos y cabezas colgando en las gruesas ramas de los arboles circundantes, permitiendo que un suave gotear llenara el silencio del lugar como producto de la sangre que escapaba de las heridas de aquellos fallecidos antes de caer en el verdoso pasto
- Tenías razón - habló repentinamente el chico frente a ella, inmediatamente consiguiendo toda su atención como si se tratara de una polilla en torno a una potente flama de fuego
- ...Q...que...? - susurró Alpha con un suave tartamudeo producido por el dolor y la debilidad aún persistentes en su ser, consiguiendo una suave mueca por parte del chico que pronto levanto su mano izquierda y la posó frente a ella con la palma en vista al cielo
Antes que la conversación pudiera continuar, una flama purpura de mana puro repentinamente empezó a flotar suavemente a pocos centímetros sobre la palma del pelinegro para luego silenciosamente flotar hasta ella y empezar a cubrirla en un manto de poder transparente que la obligó a soltar un suave quejido de satisfacción al sentir su piel, músculos, órganos y sentidos lentamente siendo curados a una velocidad extremadamente rápida
- Estos dos meses que has pasado junto a mi no has mejorado en absoluto - comentó el chico, retomando la conversación a la par que su mano volvía a caer a su lado y generando en Alpha una confusión extrema ante las repentinas palabras dichas. No obstante, antes de siquiera poder abrir sus labios en busca de respuestas, Cid la interrumpió de inmediato al tomar el mando de la conversación de manera tan natural que la rubia fue incapaz de interrumpirlo
- Siempre dices que el culto te arrebató todo lo que tenías, y esa es una verdad totalmente innegable, pero... Alguna vez notaste que tu misma has sido quien te ha privado de conseguir más cosas para llamar tuyas? - indagó el chico a la par que los ojos de la chica se abrían levemente en sorpresa y confusión ante las palabras dichas
- El primer día que nos conocimos, mientras estábamos en el bosque, tu mirada siempre se mantuvo analítica y precavida en busca de algún ataque enemigo o quizás algún entrenamiento sorpresa... Desde que llegamos a mi hogar, nunca has entablado una conversación duradera con nadie que no fuera yo... Desde que has tenido tu traje, solo has usado la versión original y el camuflaje que yo te di mas nunca has tratado de vestirte a gusto propio pese a que te dije las capacidades... Desde que empezaste a entrenar tu magia bajo mis ordenes, alguna vez te detuviste a apreciar el silencio y la paz que te rodeaba?... Desde que empezaste a participar en aquellas sesiones de escape, alguna vez apreciaste la vida silvestre, los arboles o incluso el cielo?... Siquiera alguna vez has llamado hogar al lugar donde actualmente vives? - indagó el pelinegro de manera lenta y pausada, cada ejemplo y pregunta firmemente marcada con su hablar de forma en que la chica fue incapaz de hacer nada más allá de negar suavemente con su cabeza a la par que su rostro mostraba una creciente vergüenza al notar el objetivo secreto de aquellos entrenamientos que ella había estado considerando inútiles
- Exacto, nunca te permitiste adquirir nada para ti misma, nunca te has permitido apreciar el mundo por estar enfrascada en tu deseo de venganza incesante, así que dime... Porque de repente te permitiste apreciar la hermosura del lugar? - indagó a la par que movía su rostro para observar el mismo agujero por donde Alpha había visto previamente, observando los cientos de pequeños puntos blancos brillantes en el oscuro cielo iluminado por la gigante figura de la blanquecina luna
Incapaz de hablar ante la larga pero profunda perorata que Cid acababa de tener, Alpha solamente fue capaz de levantar la mirada para observar una vez más la imagen sobre ella a la par que el manto de mana purpura a su alrededor lentamente se disipaba tras haberla curado por completo, dejándola con una calidez remanente que pareció proteger su cuerpo ante el clima nocturno del lugar
- No lo sé... - finalmente confesó la chica a la par que cerraba sus ojos y sus labios se entreabrían para soltar un suave suspiro lleno de cansancio que no era acorde a su edad mas, no obstante, pareció acorde a su comportamiento - pero... Solo... Sentí que era hermoso... Sentí que algo cambio... No sé si fue el dolor, el cansancio o el miedo a la muerte, pero, cuando estaba al borde de la espada... Simplemente me pareció hermoso... El lugar simplemente pareció brillar y ser más colorido que antes... - murmuró de manera lenta, tratando de explicar el sentimiento que asaltó su ser tras haber observado aquel paisaje momentos atrás
Sin embargo, la chica pronto se vio obligada a abrir sus ojos a la par que su rostro encaraba una vez más al pelinegro mientras mostraba una clara confusión producida por la suave risa que el chico había empezado a generar de manera espontanea - lo siento... - murmuró él entre suaves risas que lentamente fueron desapareciendo para dejar tras de sí una suave sonrisa que Alpha inmediatamente reconoció como una similar a la que él le había otorgado cuando la nombró, opacando cualquier otro tipo de sonrisa que él le hubiera dado en los últimos meses
- Es solo... Siempre dices que querías vencer al culto, pero nunca actuaste de manera acorde a tus palabras... Sin embargo, por primera vez desde que te conozco, has dado un gran paso para vencerlos... - murmuró el chico mientras se inclinaba levemente para llevar su mano derecha hasta la parte superior de la cabeza de la chica para acariciarla lenta y suavemente a la par que su sonrisa mostraba un matiz de orgullo que, para leve confusión de la rubia, genero que el corazón de la chica se acelerara por un breve segundo
- El día de hoy has hecho que el culto pierda en contra tuya al no darles el poder de arruinar tu vida permanentemente... Estoy orgulloso de ti, Alpha - susurró el chico a la par que los labios de la rubia formaban una pequeña sonrisa ligeramente tímida que permitió que ambos mantuvieran un breve silencio que el chico rompió tras pocos segundos
- Que quieres hacer ahora? Quieres ir a entrenar o...? - murmuró a la par que su voz se transformaba en un silencio total para permitir elección completa para la chica, por primera vez permitiendo que ella eligiese la actividad de su preferencia
Para la felicidad y orgullo del chico, la rubia solamente soltó un suave suspiro y sonrió levemente previo a abrir sus labios para dar una respuesta totalmente opuesta a los pensamientos que la habían estado carcomiendo los meses previos - quiero ir a casa... Quiero tomar una ducha y dormir - susurró a la par que la sonrisa de Cid parecía crecer en tamaño ante su actuar
- Si... Te lo ganaste, Alpha - murmuró el chico a la par que lentamente se ponía de pie y extendía sus manos hacía la chica en un ofrecimiento silencioso de ayuda, cosa que la chica aceptó de inmediato y se puso de pie frente a él mientras que sus miradas se mantenían pegadas en la del otro y sus manos se mantenían entrelazadas, casi como si ambos estuvieran reviviendo el momento en el que se conocieron pero mostrando una mayor tranquilidad y alegría por parte de la rubia
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Bueno, malo, meh?
Una vez más, lamento haber tardado tanto y espero que el capitulo haya sido de su agrado :D