—Sencillo. Para eliminar la amenaza a su trono, Sol —respondió Elías sin ningún indicio de duda en su tono—. Como si lo que acababa de decir fuera un hecho comprobado.
Elle sacudió ligeramente su cabeza en incredulidad. —No... entiendo. Si eso es verdad, ¿por qué no dio simplemente la orden para que esos cazadores le... hicieran daño al niño? ¿No sería eso más fácil y aceleraría el proceso?
—Eliminar no significa únicamente matar, Princesa Elle. Si el niño hubiera enloquecido, entonces estaría automáticamente inhabilitado para el trono. Además, el Príncipe Heredero no puede simplemente matar al niño. Había tomado un voto de nunca quitarle la vida a ninguno de sus hermanos. Por eso recurrió a esa táctica. Desafortunadamente para él... el niño era más inteligente de lo que jamás había pensado.
No pudo evitar fruncir más las cejas. —¿Es tan impotente el Príncipe Heredero que tuvo que ir tan lejos como para acosar a un niño pequeño de esa manera?