(Desde la perspectiva de Azul)
Me había quedado dormido otra vez. Después de haber hablado un poco con él por la mañana e intentar ayudarlo a desprenderse de sus preocupaciones, me besó en la frente y me quedé dormido al instante. ¿Qué fue eso, un encantamiento mágico?
—Su Alteza, parece cansado estos días —dijo Ruby cuando finalmente desperté—. Ya casi era la hora del almuerzo. Tomaba un baño que Ruby había preparado para mí.
—Sí.
—Y come bastante más que antes, Su Alteza.
—Tengo hambre todo el tiempo.
—Quizás Su Alteza esté embarazada.
—Pfft... ¿Qué dices? Uso anticonceptivos todo el tiempo y Dem me dijo que Luc dijo que es cien por ciento seguro. No hay forma de que pueda estar embarazada. ¿No te lo dije antes?
—Sí, Su Alteza. Pero solo mencioné lo que vi —dijo.
—Estás equivocada en esto. No estoy embarazada. Todavía tenemos que hablar de ello primero —dije.
—Mis disculpas, Su Alteza.