—Pero estaré contento si decides confiar en nuestro amor. Te quiero, Ria. Nunca dejé de hacerlo y nunca lo haré. Olvidemos todo y sigamos adelante.
—Yo... no sé si eso sea posible ya. No después de todo —dijo Ariel escépticamente, negándose a encontrarse con la mirada sincera de George, especialmente después de escuchar ese apodo cariñoso que él siempre le decía en el pasado... Mi Ria.
George tomó una respiración profunda, su voz temblorosa pero decidida —Haré lo que sea necesario para que sea posible para nosotros, Ria. Solo dame la oportunidad de intentarlo.
El aire entre ellos estaba cargado de tensión mientras Ariel luchaba la mayor batalla de su vida.
Mientras tanto, Lauren y Cheryl observaban en silencio, esperando que Ariel tomara la decisión correcta. Estaba claro que su supuesta amiga era en realidad la enemiga que los separó claramente por celos. Quién puede decir que no tenía ojos para George mientras fingía ser amiga de Ariel.