—Hermano —la voz de Eleanor bajó casi a un susurro mientras se acercaba más a Elvis, quien estaba posado al borde de la silla, su atención fija en el rostro que se parecía tanto al suyo—. ¿Podría ser nuestro padre?
Los ojos de Elvis estaban llenos de una mezcla de asombro y curiosidad mientras asentía.
—Tienes razón, Eleanor —esto es exactamente lo que me estaba preguntando—. El parecido es demasiado.
Arrugó su pequeña frente en un gesto de confusión. —¿Pero por qué mamá nunca nos habló de él? ¿Es porque es malo y Mamá nos está protegiendo de él?
Mientras veían las noticias en estado de shock, sus mentes corrían con innumerables preguntas sobre la misteriosa conexión que podría existir entre el hombre en las noticias y su pequeña familia.
Esto les dejó con un profundo sentido de anhelo y una ardiente curiosidad acerca de la verdadera identidad del hombre.