Todos estában en la cocina listos para ingerir sus alimentos, pero algo los detuvo, lo cual fue una explosión que venía del laboratorio de Sam. Todos fueron al lugar el cual estaba lleno de humo, esperaron a que el humo se fuera, ya que, entrar así sería una búsqueda envano.
-Lo... Siento- dijo una voz tenue. Esa voz delicada apenas se escuchaba.
-Sam!!!- dijo Demon, el jefe de la mansión.