Chapter 20 - Capitulo 20

POV Rose

—Soy Rose, vine ayudarte. ¿Crees que puedes ponerte de pie?

—Eso creo—se levanta de la cama y cuando pone un pie afuera casi se cae.

—Cuidado—me acerco a ella rápidamente—apoyate sobre mí.

Escucho la puerta de arriba abrirse y nos espantamos—rayos, tengo que dejarte en la cama.

—¿Qué?, ¡no!

—Simula que estas dormida—le digo mientras me escondo debajo de la cama.

—Hola, hola—oigo una voz de hombre que me parece conocida—ah, parece que estas dormida. Despierta, ¡despierta!—vocifera y me comienza a dar hipo.

—Ip, ip—rayos, me va a escuchar.

—Ip, parece que tengo hipo—expresa la chica.

—Dejame quitarte las cadenas para que vallamos a ducharte.

—Oh no—se me va el hipo del miedo.

—¿Pero qué...?—articula el hombre—¿cómo te quitaste las cadenas?—le pregunta pero ella no responde—estoy hablando contigo, ¡¿qué no oyes?!

Asomo un poco la cabeza y veo al hombre de espalda—ya me escucharas—tira se su pelo sacándola fuera de la cama—no se como lo hiciste pero ya te las veras con Chad—el hombre se da la vuelta y entro la cabeza rápidamente.

Entonces, oigo la puerta cerrarse, asomo otra vez la cabeza y como no veo a nadie, salgo—eso estuvo cerca—suspiro aliviada—¿ahora que hago, Espíritu?

—Tienes que subir para sacarla de aquí e ir a la policía o si quieres ve a la policía pero es probable que no te crean.

Elijo la primera opción y de pronto, escucho pasos—ve debajo de la cama, ¡rápido!—me dice el Espíritu y le hago caso pero iba tan deprisa que sin querer tropiezo y me caigo tumbando la cámara también.

Me meto debajo de la cama, escucho que entra y me invade un gran nerviosismo—

¿y esto como se calló?—se acerca a la cama—umm.

Percibo que abre otra puerta de la que supongo es del closet y se acerca otra vez a la cama pero se le cae una ropa—oh no—pienso, él se agacha a recogerla y me ve.

Y nos asombramos los dos, yo principalmente al ver quién es y en aquel momento, me jala por los pies—¡no!—vocifero—¡suéltame!

Me carga y yo comienzo a dar patadas—maldición—manifiesta cuando ve que no me estoy quieta.

Toma un trapo que estaba junto a la cama, me lo pone en la nariz y todo se vuelve negro.