Mientras viajábamos rumbo a Fitoa, empecé a experimentar con esa magia que Orsted usó para interrumpir mi magia. Este hechizo podría ser muy útil para dejar fuera de combate a otro mago, o incluso escapar de Orsted si el tipo vuelve a aparecer. Eris se quedó mirándome y me preguntó qué estaba haciendo. Cuando le expliqué que estaba tratando de imitar el hechizo que me lanzó Orsted, por si alguna vez nos volvíamos a enfrentar y así poder salir con vida, Eris, que iba tras de mí en la montura, me abrazó suavemente y puso su cabeza en mi espalda.
Estas últimas noches han sido dulces como la miel. No se emocionen, no he tenido nada sexual con Eris, pero ella siempre se va a dormir conmigo y siempre me besa antes de dormir y nuevamente cuando despierta en las mañanas, no decimos nada solo nos miramos y nos besamos . Son solamente dos besos diarios. Trato de no pedirle más, jejejeje, no quiero arriesgarme a algún golpe. Solo estoy dejándola expresar sus sentimientos. Obviamente, cuando ella me besa, yo respondo y la abrazo ,termino acariciándole el pelo hasta que nos dormimos abrazados, es una actitud tan diferente a como la conocí.
Ya podría decirse que Eris es mi novia, pero la verdad aún no quiero pedírselo formalmente hasta que lleguemos a Roa. La verdad es que la situación de su familia me preocupa, no quiero que Eris lo note, pero estoy muy preocupado que pasara cuando lleguemos a Roa. Dios, realmente espero que sus padres, Sauros y Ghislaine, estén allí.
Ruidjerd ya notó que mi relación con Eris cambió, y parece estar muy feliz con nosotros dos. Siempre que Eris apoya su cabeza en mi hombro o me toma de la mano, Ruidjerd nos regala una amable sonrisa. Supongo que le gusto ver nacer nuestro romance durante el viaje.
Finalmente llegamos a Fitoa. Roxy y Paul no mentían cuando me dijeron estaba todo devastado. Inconscientemente me dirigí a la aldea buena, pero cuando llegué no había nada, ni campos de trigo ni casas. Mi antiguo hogar solo eran ruinas. Mientras caminaba por los cimientos de lo que fue mi casa, las lágrimas caían en silencio por mis ojos. Miles de recuerdos llegaban a mí.
Paul y Zenith tomandome en brazos recién nacido, cuando destrui la pared , la llegada de Roxy, el entrenamiento con papá, cuando Roxy descubrió que usaba magia de gravedad y tuve que confesarle mi secreto, Silphy escabulléndose en mi habitación, el embarazo de Lilia ,el nacimiento de Aisha y Norm, y la última vez que hablé con mi madre ese día cuando vinieron a buscarme para irme a Roa.
Eris y Ruidjerd me miraban en silencio mientras recorría las ruinas. Luego me dirigí al árbol donde jugaba con Silphy, recordé cómo le enseñé magia allí y cómo se conoció con Roxy. El árbol ya no estaba, solo quedaban las bases de las raíces que salían del suelo. De ahí pude ver donde estaba la casa de Silphy, ya no había nada, todo estaba devastado. No pude evitar pensar en Silphy y en sus padres. Laws era un tipo amable y Silphy lo quería mucho, al igual que a su madre ( espero encontrar a Silphy o tal vez Roxy la encontró , dios espero que este sana y salvo). Cuando miraba hacia lo que fueron los campos de trigo, Ruidjerd me dijo, "Así que aquí fue donde naciste". Así es, le dije, pero era muy hermoso. Las colinas eran verdes y hacia el este había un bosque. Todos estos campos estaban llenos de trigo. Había un árbol gigante donde solía jugar con mi amiga cuando era niño.
"Ya veo", dijo Ruidjerd. "Me hubiese gustado verlo como era".
Eris se acercó a mi lado, me tomó de la mano y apoyó mi cabeza en su hombro. "Yo aún soy unos centímetros más bajo que ella".
Nos quedamos mirando el horizonte justo hacia donde está Roa. Pero en ese momento, Ruidjerd nos dio la peor noticia de todas: él se iba.
"¿Qué? Quédate, Ruidjerd, al menos hasta que lleguemos a Roa", le dije.
"No, ya los traje hasta su tierra, y yo ahora debo buscar al resto de los superd, así que buscaré en el continente central", respondió.
Eris estaba muy triste, pero lo ocultaba tras una máscara de chica molesta, tomando su típica pose curvando sus labios y frunciendo el ceño. Ruidjerd la miró y le dijo: "Escucha, Eris, ya llegaste hasta tu hogar y ya eres una guerrera. Ya no me necesitan aquí".
Eris no pudo soportar la despedida y se puso a llorar mientras le decía a Ruidjerd que lo iba a extrañar.
Eris, ¿Me permites tratarte una última vez como si fueras una niña?
Sí, le respondió ella.
Y entonces, el superd le acarició la cabeza y luego hizo lo mismo conmigo.
Ruidjerd, muchas gracias por todo, le dije entre lágrimas. Siempre estaré en deuda contigo. Permíteme llamarte mi amigo.
Claro que ustedes son mis amigos, chicos, nos dijo Ruidjerd. Y no debes agradecerme nada. Yo soy el que les debe a ustedes. Desde que los conocí, hicieron todo lo que pudieron por limpiar mi nombre y el de la tribu superd, y lo han logrado. Nunca me imaginé que llegaría el día en que vería a la gente tratarme de manera normal y no daliera huyendo al saber que soy un superd, y todo gracias a ustedes. Ahora espero encontrar a mi pueblo que fue exiliado hace tantos siglos y salir de la clandestinidad con la frente en alto, y demostrar que somos personas normales que solo queremos vivir en paz. Gracias por creer en mí, Rudeus, Eris, y no lloren, les prometo que los volveremos a ver, ahora se tienen el uno al otro de ahora en adelante, sea lo que sea que encuentren cuando regresen a su hogar. Ustedes deben apoyarse, porque eso es lo que hacen los guerreros. Antes de que se fuera, no pude evitar darle un abrazo a Ruidjerd y volver a agradecerle por todo. Eris hizo lo mismo y le dimos un abrazo grupal. Finalmente, Ruidjerd nos dijo adiós, tomó su caballo y luego lo vimos desaparecer en el horizonte, mientras Eris y yo estábamos tomados de la mano. Cuando perdimos de vista a Ruidjerd, tomé a Eris de las mejillas y le pregunté: "¿Estás lista para regresar, Roa?" Ella asintió con la cabeza y con determinación en su mirada. Aproveché para besarla y darle un abrazo. Subimos al caballo y partimos rumbo a Roa. Cuando al fin llegamos al atardecer, solo vimos un gran campamento. Roa solamente eran ruinas, solo había tiendas de campaña y algunos campos de trigo por aquí y por allá. La mansión Boras solamente quedaban los cimientos y los grandes muros que rodeaban la ciudad solo eran ruinas, el mercado, el gremio, las tiendas, las mansiones , no habia nada.
Mientras entrábamos al campamento, podíamos oír llantos de personas que se enteraban de que sus familiares habían muerto. Algunos niños jugaban por aquí y por allá, pero todo era lúgubre. Aun así, había gente trabajando construyendo casas sólidas, pero todo avanzaba muy lentamente. Finalmente, llegamos a una pequeña casa sólida que funcionaba como oficina, donde se suponía que estaba Alphonse. Vimos una figura familiar dentro: una mujer musculosa con piel morena, cola y orejas de gato. Ghislaine gritó "Eris" mientras saltaba del caballo. "Eris", gritó la mujer gato, y se fundieron en un gran abrazo mientras Eris lloraba y le decía lo feliz que estaba de volver a verla. Cuando bajé del caballo , me acerqué a ellas. Ghislaine me miró y con una gran sonrisa me dio las gracias por traer a Eris de regreso.
En ese instante salió Alphonse de la cabaña y nos dijo que se alegraba de vernos, pero algo estaba mal: su cara estaba tensa.
Lady Eris, ¿podemos hablar? , dijo. Joven Rudeus le molestaría esperar afuera, por favor. (Mierda, esto es malo, no está Sauros, Phillip ni Hilda), pense nerviosamente.
Eris me tomó de la mano y dijo: "No, él se queda".
"Como usted guste, Lady Eris", dijo el mayordomo. Nos hicieron entrar en una pequeña sala y tomamos asiento.
"Primero que nada, Lady Eris, estamos muy felices de que regres..."
"Ve al grano", dijo Eris, "¿quién está muerto?"
Alphonse, con una cara muy demacrada, finalmente habló: "Lord Sauros, Lord Phillip y Lady Hilda, sus padres, cayeron en la zona de conflicto y fallecieron allí. Ghislaine pudo confirmarlo. Lord Sauros fue culpado por el accidente y fue ejecutado".
"¿Qué?" grité, aparentemente más alto de lo que pensé. "¿Por qué mataron al tío Sauros? No fue su culpa, nadie sabía que esa maldita cosa iba a..."
"¡Rudeus, basta!" me dijo Eris. "Siéntate". La miré, tenía la cabeza gacha, no pude ver sus ojos tras su pelo y me sostenía muy fuerte de la mano. Le hice caso y me senté.
"Y ahora, ¿qué pasará?", preguntó Eris. Alphonse hizo una mueca y luego dijo: "El señor Philemon Notos Greyrat la ha pedido como su concubina, mi señora. No pudo terminar la frase". Y Antes de que yo dijera algo, Ghislaine gritó furiosa: "¡Alphonse, pedazo de mierda, cómo te atreves a considerar la propuesta de esa escoria!".
"Escoria o no, aún es un noble", dijo.
"¿Y piensas entregarle a Eris a esa basura?"
"Es por el bien de Fittoa".
"¿Y qué hay de Eris, maldito?", Ghislaine miró a Eris y le dijo: "Eris, huye de aquí, sé feliz".
Eris solo dijo: "Déjenme sola, por favor". Ghislaine y Alphonse rápidamente salieron.
"¡Eris!", le dije. "Oye, yo... no escuchaste. Rudeus, déjame sola.
"Está bien".
Cuando salí de la cabaña, pude escuchar a Eris romper en llanto, así que me alejé de ahí para dejarla desahogarse. Había perdido a su familia y no había una maldita tumba donde dejarles flores. Yo también lloré en silencio. Los Boreas eran como mi familia, el viejo Sauros y Phillip siempre me trataron bien, e Hilda me habia tomado cariño.
Pero antes que nada, Alphonse y Ghislaine me llamaron y entramos a una tienda de campaña.
Y ahora, ¿qué mierda Alphonse? -dijo Ghislaine muy molesta.
Alphonse mantuvo la calma y nos contó que había rumores de que Philemon Notos había traicionado a la segunda princesa en la disputa por el trono y se había aliado a la facción del príncipe Graben. Temía que quisiera a Eris para usarla como moneda de cambio y darsela al primer ministro Darius, del que se dice hay rumores de ser un pederasta y un violador, ademas Sauros siempre sospecho que ese cerdo estaba detras del secuestro de Eris.
¿Y por qué demonios querías enviarla con él? -dijo Ghislaine.
Debía decirlo -dijo el mayordomo- el protocolo así lo manda.
¿Y qué otras opciones hay? -pregunté.
Podríamos enviarla con el jefe de la casa Boreas, James, su tío, pero no creo que él la quiera a su lado, por varias razones, pero principalmente dos.
Primero, no quiere tener problemas con el ministro Darius, la casa Boreas está muy debilitada y sus enemigos están al acecho.
Y segundo, son los hermanos de lady Eris, esos jóvenes no saben que son hijos de lord Phillip . "Y si Eris llega allí, sera cuestión de tiempo que los chicos descubran que James no es su verdadero padre y causaría otro conflicto interno en la nueva casa Boreas."
"¿Y qué otra opción tenemos?" preguntó Ghislaine.
"Yo tomaré a Eris y huiré con ella a las tierras del Norte", dije.
"¿Qué? Pero Joven Rudeus, Lady Eris debe quedarse en Roa y mantener el legado de Lord Sauros", dijo Alphonse.
"Escucha, Alphonse", dije, "Fitoa es ahora responsabilidad de James Boreas Greyrat. Además, dime una cosa, ¿qué hubieran querido el tío Sauros, Phillip e Hilda que pasara con el futuro de Eris?"
"Ellos querían que Lady Eris fuera feliz", dijo Alphonse.
"Así es, y yo estoy dispuesto a largarme con ella y tú podrías darla por muerta para que los nobles asquerosos no la busquen, pero eso es decisión de Eris. Hay que preguntarle una vez esté más calmada."
"Así lo haremos, Joven Rudeus", me dijo el mayordomo, mientras veia algo de alivió en su cara ( al parecer parecer tampoco queria enviar a eris con Philemon ). "Ahora puedo ver por qué Lord Sauros y el joven Phillip lo apreciaban tanto", me dijo el mayordomo con una suave sonrisa.
"Iré a tomar un poco de aire", dije mientras salia de la tienda . Ghislaine me siguió y llegamos a la lista de desaparecidos, muertos y sobrevivientes del desastre. Le dije a Ghislaine que tachara a Aisha y Lilia de la lista de desaparecidos y las pusiera en la lista de sobrevivientes. Pude ver el nombre de los padres de Silphy en la lista de muertos, pero para mi felicidad, Silphy estaba en la lista de sobrevivientes. Ella está viva. Pero cuando le pregunté a Ghislaine dónde estaba, me dijo que no estaba aquí, que seguramente estaba viviendo en otro lado. Solo llegó un informe de que ella estaba viva (tal vez Roxy la encontró). ¡Es un alivio! Suspiré.
"Oye, Rudeus", preguntó Ghislaine, "¿qué pasó estos tres años?", preguntó.
Así que empecé a contarle toda la historia. Se sorprendió de que Elinalise y Tallhand estuvieran ayudando a papá, y que estuviéramos con un superd.
Él te hubiese caído bien, Ghislaine, lástima que se fue esta mañana.
"Ya veo", dijo Ghislaine, "siempre quise conocer a un superd."
También se sorprendió mucho al saber que Eris y yo éramos Santo Espada y Santo del Norte respectivamente, pero ¿cómo es posible, dijo Ghislaine, yo no pude enseñarle la espada de la luz? .
Bueno, Ruidjerd la había entrenado al nivel de una santa espada, pero un día conocimos a un triple emperador de esgrima llamado Randolph Marianne, y el tipo, a pesar de parecer un villano, me nombró Santo Espada a mí y a Eris le enseñó los fundamentos de la técnica,espada de la luz, y hace unos meses atrás logró dominar la técnica.
Rudeus, ¿Randolph Marianne dijiste? ¿Estás seguro?
Sí, era un señor bastante amable, aunque tenia una sonrisa que daba miedo ,tenía un restaurante en el reino del rey dragón.
¿Acaso no sabes quién es él?
No, ¿es un chef y antiguo espadachín?,dije
¡Él es el dios de la muerte, el quinto entre las 7 grandes potencias!
¿Qué? ¿Estás diciendo que el dios de la muerte me nombró Santo del Norte?, dije casi en shock.
Vaya, ustedes dos nunca dejarán de sorprenderme, dijo la gata.
luego de calmarme por saber que conoci al dios de la muerte, Ghislaine cambio de tema y preguntó:
Oye, Rudeus, ¿te vas a ir con Eris?
Si , mi papá me advirtió que esto podía pasar y me dijo que huyera con Eris.
¿Paul te dijo eso?, vaya, eso es muy maduro de su parte, pero Rudeus, ¿tú amas a Eris?
Sí, la amo y creo que ella siente lo mismo.
Ella te ama desde que te conocio Rudeus , dijo Ghislaine, también creo que lo mejor para Eris es estar contigo ( ¿que? Desde que le conocio , Pero ella siempre me golpeaba)
Luego de despedirme de Ghislaine, me asignaron una tienda, así que aproveché para bañarme, ponerme ropa limpia y comer algo. Al otro día ya tenía planeado hablar con Eris. Mientras estaba tirado en la cama, Eris me habló.
Rudeus, ¿estás ahí dentro?
Sí, pasa.
Eris ingresó con un traje muy sensual, de color negro, muy parecido al que trató de seducirme en mi décimo cumpleaños y olia a perfume.
¿Estás bien? -le pregunté.
Sabía que algo así podía suceder -dijo.
Eris, yo lo siento mucho por tu familia.
Lo sé, yo también -dijo.
Ahora estoy sola.
¿Y qué piensas hacer?
¿De qué hablas?
De lo que te dijo Alphonse.
Claro que no iré con ningún imbécil. (Bien, este es el momento, le preguntaré si quiere irse conmigo).
Oy.... (No alcancé a hablar, Eris me interrumpió).
Escucha, quiero que tú seas mi familia. Ya tengo 15 años y quiero que cumplas tu promesa.
¿Cumpliste 15 años cuándo?
Cuando me convertí en Santa Espada. ¿Recuerdas ese día que te derroté? Ruidjerd me dijo que ya era una guerrera.
¡Ah! Lo siento, lo olvidé. No te regalé nada. Espera... y conjuré un anillo de piedra, le di un color rojo como su pelo y lo puse en su dedo.
Muchas gracias es hermoso (dijo emocionada) , pero quiero otro regalo. Quiero lo que me prometiste cuando cumpliate 10 años.
¿No se supone que yo debía tener 15?
No importa, dijo mientras se subía sobre mí y me besaba.
Escucha Eris, yo te amo, le dije.
Se puso muy roja, pero también respondió.
Siempre te he amado, Rudeus, y nos besamos nuevamente.
Escucha Amor, no quiero aprovecharme de ti. Aún estás triste por las malas noticias. ¿No sería mejor esperar?
Escucha, Rudeus, mi mamá me enseñó esto y es muy vergonzoso, así que lo voy a decir una sola vez.
Acercó su boca a mi oído y susurró: quiero ser tu gatita toda la noche, Rudeus. Miau.
Y eso fue todo lo que necesitó para hacerme perder mi racionalidad , mi cerebro adolecente y mis genes Greyrat se apoderaron de mi. Esa noche, Eris y yo pasamos a la adultez juntos. No puedo describir lo feliz que me sentí cuando Eris y yo hicimos el amor por primera vez , estava perdiendo la virginidad en este mundo con la mujer que amaba ( y no borracho en una fiesta con un chica que recien habia conocido, como mi vida anterior).
Mientras descansábamos después de perder la virginidad, Eris me miraba con unos ojos muy hermosos y llenos de amor.
- Oye, Eris.
- Sí, Rudeus, amor.( Eso suena genial)
- Mañana nos fugaremos al norte, iré a buscar a mi madre y quiero que vengas conmigo.
- ¿Estás seguro?
- Claro que sí, ya lo hablé con Alphonse y está de acuerdo. Luego que nos vayamos, él te va a declarar muerta, para que ningún noble te siga, y así estaremos sin peligro de que envíen a alguien por ti. Y cuando encontremos a mi madre... Bueno, Eris, yo te amo, y supongo que eres mi novia yo queria saber si ....si...¿te casarías conmigo?
Eris me dio una sonrisa muy grande y luego me besó. "Sí, Rudeus, acepto", me dijo. Realmente me sentí en las nubes. La abracé muy fuerte, pero me di cuenta de que nuevamente estaba excitado.
- ¿Quieres volver a hacerlo, Rudeus?
- No, tranquila, podemos hacerlo otro día.
- Yo sí quiero, Rudeus asi que se subio sobre mi y procedimos a hacerlo una segunda vez esa noche , dios realmente estafa tan feliz que podria haber muerto sin ningun arrepentimiento.
Cuando finalmente terminamos, nuevamente me quedé mirando a Eris. Esta vez, ella había dominado y descansaba mi cabeza en su brazo, mientras la miraba a los ojos y me iba durmiendo. Solo podía pensar en lo que nos depararía el futuro de ahora en adelante: encontraría a mamá, reuniría a mi familia, me casaría con Eris y tal vez tendría 3 o 4 hijos con ella ¡Eso sería genial! Nunca tuve familia en mi otra vida, así que me encantaría formar una con Eris. Tal vez estudiaría en Ranoa, podría vender estatuillas para pagar la universidad, ya sé que pagan un buen dinero por estatuillas y así tendría un buen pasar con mi amorcito. Luego, podría ser profesor y llevaríamos una vida tranquila. Aunque me preocupan nuestros hijos, seguro irían tras chicas ferales jajajajajaja. Y así estaba sumergido en mis fantasías cuando Eris me volvió a besar, viendo que estaba a punto de dormirme.
"Buenas noches, Rudeus. Te amo", dijo Eris.
"Yo también te amo, Eris", respondí.
Y así me quedé dormido en la noche más feliz de mi vida.
desperté cuando ya era de mañana, y al parecer me dormí con una sonrisa. Cuando miré a mi lado, Eris no estaba. Mmm, seguramente se levantó antes y está entrenando, pensé. Cuando me iba a levantar, encontré en el piso cabello rojo. ¿Es el cabello de Eris? ¿Qué pasó? ¿Estará bien? La fui a buscar a su tienda pero no había nadie y sus cosas no estaban. Volví a mi tienda y me fijé en una nota que había en una mesita cerca de mi cama. Al tomar la nota, solo decía:
"Tú y yo no somos compatibles por ahora, me voy. Nos vemos."
¿Qué? Esto debe ser una broma, pensé. Rápidamente fui hasta donde estaba Alphonse y le pregunté por Eris. "Lady Eris y la señorita Ghislaine se fueron al amanecer, y dejaron órdenes precisas de no decirle a dónde se dirigían."
¿Qué? ¿Cómo? ¿Por qué? Alphonse, yo...
Lo siento, joven Rudeus, la verdad es que yo tampoco sé a dónde se dirigieron. Solo abandonaron el campamento muy temprano de madrugada y se me pidió que le informara su decisión.
No entiendo. Dí media vuelta y salí de la oficina de Alphonse. Empecé a caminar. Caminé por horas hasta que el campamento de refugiados se veía diminuto en el horizonte. La amo, ella dijo que me amaba. Dijimos que nos casaríamos. Me dijo que quería una familia. ¿Qué pasó entonces? Y ahí empecé a llorar. Creo que nunca había llorado tanto, ni tan desconsoladamente, ni en esta vida ni en la otra. No dejé de preguntarme todo ese día: ¿por qué? ¿Por qué se fue? No entiendo qué hice mal. ¿Fue el sexo? No, ambos éramos vírgenes, eso no fue. ¿Qué pudo ser entonces? ¿Dije algo malo? Tal vez no debí apurar las cosas. Tal vez ella pensó que me aproveché de su debilidad al enterarse de la muerte de su familia. Pero ella fue quien pidió hacer el amor. Entonces, ¿qué salió mal? Maldita sea, no lo entiendo. ¿Se asustó de que le pidiera matrimonio? Pero parecía feliz cuando aceptó. Cuando regresé al campamento, Alphonse estaba muy preocupado por mí, pero no le di importancia y me fui a mi tienda, el pelo de Eris aún estaba allí, lo dejo como un cruel recuerdo. Ella ni siquiera tomó su parte de el dinero que hicimos como aventureros, solo se fue con sus cosas. Lo único que faltaba eran mis calzoncillos, que no sé dónde quedaron anoche.
Tomé el pelo de Eris y entre ellos estaban las bragas de Eris. Creo que se fue tan rápido que las olvidó (realmente tenían ganas de alejarse de mí). Tomé un poco del pelo de Eris y sus bragas, y por alguna razón que no entiendo, las guardé en mi mochila. Me quedé mirando su pelo en el piso, no comí nada ese día, apenas bebí agua, y así no me di cuenta cuando me dormí. Al otro día, Alphonse entró en mi tienda, me encontró llorando mientras acariciaba el pelo de Eris que ella dejó.
"Joven Rudeus, por favor, come algo. También necesito que me ayudes en algunas cosas".
"¿Qué quieres, Alphonse?"
"Por favor, joven Rudeus, acompáñeme. La gente no tiene suficiente agua y hay que hacer pozos. Cada día llegan más refugiados y el agua está escaseando".
Con su magia, las cosas podrían ser más fáciles, joven Rudeus. Sé por el dolor que estás pasando.
Escucha, Alphonse, no sabes nada. Pasé los últimos 6 años al lado de Eris, siendo su tutor, y luego cuidándola en el continente demonio , Milis y el continente central. Estaba dispuesto a pelearme con toda la maldita aristocracia Asurana por ella, estaba dispuesto a dar mi vida por ella, así que tú no entiendes nada.
Perdón, joven Rudeus dijo el mayordomo, pero antes de retirarse, lo llamé, Alphonse ¿Qué debo hacer?.
Y así, me dediqué a hacer pozos. Me fue muy fácil hacerlos con magia de tierra. Luego represé el río según las instrucciones de Alphonse, para el riego de los campos. Por último, construí un gran muro con magia de tierra alrededor, algo que dejó a los aldeanos asombrados y a algunos asustados. También realicé varios otros trabajos, como formar más calles y abrir agujeros para instalar letrinas. Cuando terminé tras 1 semana, finalmente le dije a Alphonse que partiría a los países del norte a buscar a mi madre.
Joven Rudeus, no sabe lo agradecido que estoy por todo lo que ha hecho me dijo Alphonse.
Está bien, le dije. Luego miré aqua hartia
Oye, Alphonse, toma esto. Puedes venderlo, seguro es caro, y así podrías construir más cosas para la gente.
Joven Rudeus, no puedo aceptar eso.
Esto me lo regaló Eris, ya no lo quiero.
Escuche, joven Rudeus, este regalo lo encargaron entre Eris, el joven Phillip, la señora Hilda y el señor Sauros. Si lo deja aquí, también dejará el cariño que esas personas sentían por usted. Sé que se siente dañado por la señorita Eris, pero le ruego que lo conserve.
Luego de pensarlo un segundo, me di cuenta de que tenía razón. Esto también fue un regalo de parte de los Boreas y sería como escupir en su recuerdo deshacerme de él.
Está bien, Alphonse, entiendo. Lo conservaré.
Joven Rudeus, antes de que se vaya, tome esto, y me entregó una bolsa con 10 monedas de oro.
¿Y esto para qué es? ¿No sería mejor usarlo para la gente en Roa?
Por favor, acéptelo, no como pago, sino como una ayuda para la busqueda de su madre , ud y el señor Paul han hecho mucho por Fitoa es lo menos que puede hacer.
Entiendo , le dije, bueno Alphonse , deje mi caballo para que lo usen aca, es hora de irme, muchas gracias por todo y buenas suerte.
Adios joven Rudeus , y asi me fui de Roa en busqueda de mi madre y de Silphy .
Perspectiva de Eris
Despierta, ¡es hora de seguir! -me dijo Ghislaine-. Nos dirigimos al santuario de la espada para entrenar con el dios del filo, Gal Farion.
-¿Estás segura de abandonarlo? -preguntó Ghislaine.
-Sí, debo hacerme más fuerte. Lo vi morir en manos del dios dragón y no pude hacer nada. Después estaba entrenando magia para volver a enfrentarlo. Rudeus es muy fuerte y para estar a su lado debo ser igual de fuerte.
-Él te pidió matrimonio y le dijiste que si ¿Crees que fue buena idea dejarlo?
-Estoy segura de que él lo entenderá, Ghislaine, anoche cuando me converti en adulta , note algo , Rudeus es mas joven que yo y mas pequeño, y aun asi me pretegio todos estos años, arriesgo su vida por mi , yo solo me aproveche de el todos estos años de el, yo lo amo mas que a mi vida , pero aun no soy digna de el.
-¿Y qué pasará si demoras años en llegar y está con otra mujer?
-No me importa, volveré y me casaré con él, aunque sea su segunda o tercera esposa. Yo amo a Rudeus y él me ama a mí. Él se dará cuenta por qué debo irme, entrenaré, me volveré fuerte y juntos derrotaremos al dios dragón, luego formaremos una familia.
-Ahora vamos, Ghislaine, el santuario de la espada está muy lejos.
Ghislaine la siguió en silencio, pensando en las últimas palabras que Rudeus le dijo: "yo amo a Eris y me escaparé con ella al norte,".
Yo amo a Rudeus. Lo amo desde que me salvó de los secuestradores, y luego lo amé aún más. Regresaré, lo prometo, y veremos crecer a nuestros hijos. Pero no puedo soportar verlo morir nuevamente a manos de ese monstruo. Hacerme fuerte es la única opción que tengo. No quiero ser una carga para él, quiero ser su igual.
Ghislaine solo la escucho . Ella ya tomo su decisión pensó la gata.
El Grupo De Roxy
Mientras tanto, en el continente demoniaco, al noroeste, en la ciudadela de Kurusama, Roxy y Tallhand se encontraban borrachos junto con una pequeña chica demonio. La búsqueda hasta ahora es un fracaso, no han encontrado ningún rastro de la familia de Paul ni de Silphy, y así, para olvidar un poco la mala racha, decidieron beber un poco. Elinalise rápidamente desapareció y de la nada llegó esta niña que ahora está en una competencia de bebida con el enano , Roxy está muy ebria.
Cuando la competencia acabó, la niña, que se hizo llamar la gran emperatriz, derrotó a Tallhand en quién soportaba más alcohol. Cuando llegó el dueño del bar para cobrar la cuenta, la niña no tenía dinero, así que el dueño la tomó y la llevó para venderla como esclava, ante las protestas de la niña diciendo que era la gran emperatriz Kishiroka.
Sintiendo lástima, saqué varias monedas a Tallhand y pagué los daños y el alcohol. De todos modos, él fue el que más bebió.
Y luego me dejaron a Kishirika atada a mi lado.
Muchas gracias por salvarme , esta doncella está en deuda contigo. Pídeme lo que quieras.
¿Qué podrías darme si no tienes ni dinero para pagar tu alcohol?
Soy la gran emperatriz Kishirika Kishirisu, te puedo dar un ojo de demonio.
Roxy Lo pensó, eso me vendría bien, pero luego recordó.
Bien, gran emperatriz, usa tu ojo de demonio para ubicar a la familia Greyrat: Paul, Zenith, Lilia, Aisha, Norm y Rudeus, y a una niña elfa llamada Silphiette.
Déjame ver... ya los veo.
El padre, la sirvienta y las 2 hijas están a salvo en Miliishion. Rudeus está camino a la mandíbula superior del wyrm rojo, se dirige a los territorios del norte del continente central, está solo y está muy triste, está llorando en este momento. La madre... la madre está en la ciudad de laberinto de Lapam en el continente de Begarit, pero no la puedo ver bien, debe estar dentro de un laberinto. Y la niña elfa está en la universidad mágica de Ranoa, es una estudiante y al parecer está protegiendo a alguien.
Oh, gracias a Dios todos están vivos. Pensé, ¿pero qué le pasó a Rudy? ¿Por qué está llorando? ¿Eris y Ruidjerd estarán bien? - Roxy se preguntó muy preocupada. Además, Silphy está en Ranoa. Debería ubicar a Rudeus e ir a buscarla, pero como ella está estudiando allí, ¿a quién proteje?
Una gran risa me sacó de mis pensamientos. ¡Jajajajajaja! Soy el gran rey demonio Badigadi - dijo un hombre de 6 brazos, muy alto ,piel negra y cabello morado, y a su lado Elinalise, que al parecer había pasado la noche con este tipo.
"Badi, mi amor", dijo Kishirika, momento en que Roxy quedó helada al darse cuenta de que Elinalise se había acostado con el prometido de la gran emperatriz.
"Oye, Badi, ¿estabas con esta elfa?"
"Así es, amor. Tu servidor disfrutó de su compañía. Como sabes, no puedo entrar en ti porque aún no recuperas tu forma de adulta."
"Está bien, Badi. Esta doncella ya te dio su permiso. Espero crecer pronto para casarnos."
"¡Ufffff, eso estuvo cerca!", pensó Roxy.
"Ok, chicos, nuevos planes", le dijo Roxy a Elinalise y a un borracho Tallhand .
Ya sé dónde está Zenith, se encuentra en Lapam en Begarit. Debemos avisarle a Paul y Rudeus, así que iré a buscar a Rudeus y tú y Tallhand vayan a buscar a Paul.
Oh no, por ningún motivo yo iré donde ese imbécil de Paul, protestó la elfa.
Pero ¿por qué?
Simplemente lo odio. Yo iré a buscar al chico y tú y Tallhand vayan por Paul.
¿Por qué yo no puedo ir por Rudeus?
¿Qué pasa Roxy, estás celosa?
No, claro que no, pffff. Está bien, yo iré a avisarle a Paul y tú ve y avisale a Rudeus en el norte del continente central.
¡Jajajaja! ¿Rudeus? Oye amor, ¿ese no es el nombre del chico que dijiste que tiene más poder que Laplace? Dijo Badigadi
Así es, querido. Esta doncella nunca podría olvidar tal cantidad de poder.
¡Jajajaja! Este servidor entonces acompañará a la elfa para conocer a ese niño.
No le vas a hacer nada a Rudy, ¿verdad?, preguntó Roxy.
¡Jajajaja! Claro que no, solo quiero conocerlo y hablar con él. Yo no soy un rey demonio conflictivo, soy Badigadi el sabio. ( Si un sabio que parece que podria matarte de un golpe).
Está bien, supongo que sería de ayuda si un rey demonio ayuda a buscarlo.
Esa tarde, Badigadi, usando sus contactos, abordó un barco de gente del mar junto con Elinalise, y se despidieron.
Adiós Roxy, juro que encontraré a tu amado discípulo, y me encargaré de contarle lo frustrada que te sentías, mientras te masturbabas bajo las sábanas pensando en sus besos.
Oye Elinalise, ¿cómo sabes eso? Y no lo hacía pensando en Rudy.
Sí, claro, ¿en quién más entonces si es el único hombre que has besado? Jajajajaja.
Oye Elinalise, cuando lo encuentres, él tendrá 14 o 15 años, tú no vas a... mmm.
¡Puaj, claro que no! Jamás me convertiría en nuera de Paul, además es tu hombre, no le quito los novios a mis amigas.
Roxy se enrojeció como un tomate.
Adiós Roxy, cuídate, te veré pronto.
Tallhand, piérdete y muérete en un agujero, maldito enano.
Lo mismo para ti, perra -dijo el enano escupiendo al piso.
De seguro, ellos se despiden así siempre, pensó Roxy.
Adiós Kishirika, mi amor. Este servidor regresará en unas décadas. Cuídate, no te vuelvas a morir dijo el rey demonio.
Adiós Badi, mi amor , se despidio la emperatriz con un sonrisa
Cuando las despedidas habían acabado y Roxy y Tallhand se dirigían al sur para llegar a Miliishion, Roxy recordó algo y se golpeó la cabeza.
Mierda, olvidé decirle a Elinalise que Silphy está en Ranoa. Rápidamente, Roxy escribió varias cartas a Silphy y las envió en cada gremio que encontró, con la esperanza de que una le llegara a su antigua discípula y amiga. Y así, Roxy partió junto al enano lamentándose por no poder encontrarse con Rudeus y Silphy.