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Luego vino la sesión de evaluación, donde los jueces comentaron cada trabajo uno por uno. Como era de esperar, todos estaban llenos de alabanza para el trabajo de Eve Doleman. Con las habilidades actuales de Eve, incluso los jueces presentes difícilmente podrían competir con ella. Lo que era aún más sorprendente era que ella no era una diseñadora profesional. Nunca había estudiado diseño de manera profesional y generalmente estaba ocupada filmando, presuntamente sin tiempo para estudiar. Para crear un trabajo tan impresionante ahora, debía tener un talento excepcional.
Para este momento, todos los jueces habían expresado su opinión, y el anfitrión no pudo evitar mirar a Elijah Flack —Señor Flack, ¿cuál trabajo le gusta a usted?
