Cory Hughes se mofó:
—¡Eso no es un préstamo! Invertiste trescientos millones de dólares y a lo largo de los años, la familia Gaile se ha aprovechado del poder de la familia Hughes y ha obtenido muchos beneficios, que ya compensaron esos trescientos millones. ¿Y ahora vienes a mí por dinero? ¿Por qué debería dártelo? ¿Cuál es el valor de tu familia Gaile para nosotros?
Simon Gaile levantó la vista en incredulidad, mirando a Cory Hughes, sus dedos temblaban violentamente:
—Tú...
El señor Gaile se oscureció el rostro:
—Abuelo, déjalo. Simplemente no quieren ayudarnos, es inútil suplicar. Hagamos una cruz sobre esos trescientos millones de dólares y nuestras familias no tendrán más contacto.
Cory Hughes no se molestó en absoluto por las burlas del señor Gaile:
—¡Trato hecho! Vamos a actuar como si no nos conociéramos y nunca tuviéramos contacto de nuevo. La familia Gaile ya no es digna de nuestra familia Hughes; señor Gaile, ¡por favor váyase!
