—Xaviera Evans se mofó.
Este repentino sonido sobresaltó a la familia Woods. La Sra. Woods luchó por levantar la cabeza, mirándola con ferocidad. Apretó los dientes y gritó:
—¡Xaviera Evans!
—¡Caleb Mamet es un demonio! ¡Tú también eres un demonio! Hemos sido arruinados por ustedes, ¿qué más quieren? ¡Solo mátennos! Ja ja ja...
La expresión de Xaviera fue indiferente:
—¿Está muerta Zara Woods?
—¿Tienes el descaro de preguntar por ella? —La Sra. Woods se burló fríamente—, sus ojos llenos de un profundo odio. Luego, se rió como una loca—, Ja ja ja... ¡Parece que no tienes idea de lo que Caleb ha hecho! ¡Definitivamente no se atrevió a decírtelo!
—¡Eso es correcto! ¡No se atrevió! Quizás siempre lo has considerado un hombre gentil y cariñoso, pero en realidad, él es un demonio astuto, malvado, cruel y violento.