—Derek Evans la llamó, esperando que ella pudiera rogar a Alberto para que los perdonara.
En este mundo, nadie deseaba más que Xaviera que la familia Evans fuera arruinada. ¿Cómo podría ella suplicar en su nombre?
—Contestó la llamada. Derek tomó una respiración profunda, tratando de calmar su ira, su voz suprimida pasando a través —Xaviera...
—Xaviera alzó las cejas.
—Derek jugó a ser débil —Estoy enfermo. ¿Puedes volver y verme? Te extraño.
¡Ah! ¿Derek Evans está enfermo? ¿La extraña? ¡Qué tontería!
Para engañarla para que volviera, incluso inventó tal mentira. ¿No le tenía miedo a la mala suerte?
—Sin embargo, Xaviera se mantuvo calmada. Ya que él quería que ella volviera, volvería y acompañaría a la familia Evans para ver qué trucos estaban tramando.
—Xaviera rió entre dientes —Está bien, volveré para verte.
Se estaba aburriendo, y ya que la familia Evans se estaba entregando en su puerta, ¡era una oportunidad perfecta para divertirse un poco!
...