—Mientras Xaviera murmuraba en su corazón —Caleb Mamet de repente tosió.
—Page Uland sabía que Caleb debía haber escuchado algo, y Xaviera no sabía acerca de este secreto —no sabía qué locuras estaba pensando en este momento.
—Miró a Caleb y descubrió que Caleb también lo estaba mirando, y entonces los dos apartaron la mirada al mismo tiempo.
—De pronto, Xaviera habló —Maestro Uland, parecía que tenías algo que decirme hace un momento. ¿Hay algo que desconozco?
—Page Uland dudó por un momento —Quería decirle a Xaviera que salvar a las personas con su sangre tenía efectos secundarios, y que la otra parte podía escuchar sus pensamientos internos —Pero ahora…
—Page Uland frunció el ceño.
—Parecía que a Caleb le gustaba mucho esa sensación —Si hablaba de ello ahora, ¿no arruinaría la diversión entre la pareja?
—Así que se aclaró la garganta y dijo —No lo recuerdo.
—Xaviera suspiró —Ah, el envejecimiento, mi memoria no es tan buena como antes.
—Page Uland ...
—¡Pequeño pillo!