La joven se levantó tímidamente y, como un pequeño conejo, caminó temerosamente hacia Caleb Mamet. —Hola, Hermano Caleb...
Xaviera Evans levantó las cejas. —Vaya, vaya, vaya, ¿le están dando mujeres a Caleb frente a su esposa legítima? ¿Cuánto ignoran estas personas a ella?
La Sra. Mamet corrió emocionada para presentarla. —Caleb, nuestra Yvette Flack es un poco introvertida y tímida, a diferencia de algunas mujeres atrevidas y promiscuas. Es inocente y de buen corazón. Así que después de que se una a la empresa, tendrás que cuidar bien de ella, para que no sea acosada.
Después de eso, advirtió a Xaviera Evans con una mirada. —Y algunas personas ... Caleb, también tendrías que tener cuidado con ellas, para que no hagan daño a Yvette por celos y empañen la reputación de la familia Mamet.