Ashton Heath levantó sus profundos ojos negros para mirarla, su hermoso rostro mostrando una expresión ligeramente más relajada que antes.
Era claro que sus palabras anteriores le habían complacido.
Una insinuación de sonrisa apareció en sus ojos, pero mantuvo una cara de póker:
—Yo no te pedí eso.
—Sí, sí, sí —Joanna Lawrence continuó reprimiendo su risa y consentía al hombre orgulloso—. Tú no me pediste, solo quería comprarlo por ti misma.
—¿Comprarme lo costoso?
—Sí, comprar lo costoso, elegir el más costoso.
—Yo no te obligué.
—Sí, sí, sí, tú no me obligaste. Todo fue voluntario.
—Como dijiste, iremos al centro comercial más tarde —Al decir esto Ashton, una tenue sonrisa apareció en sus ojos y en la esquina de sus labios.
Él atrajo a Joanna hacia sus brazos y la dejó sentarse en su regazo, sosteniéndola mientras abría un archivo:
—Solo acompáñame a revisar los últimos archivos y luego podré dejar el trabajo.