Pero que ella no se tome las cosas en serio no significa que los demás piensen igual.
Si la provocan directamente y ella no se defiende, pensarán que es fácil de intimidar.
Especialmente cuando la persona que la provoca es Rebecca Kelloway.
Joanna ha sido paciente con Rebecca por mucho tiempo.
—Bueno —Al otro extremo del teléfono, Rebecca soltó una risita—. Muéstrame tu prueba y asegúrate de no borrar secretamente el historial de llamadas.
—Por supuesto que no lo borraré —Joanna miró hacia el baño y sonrió—. Mi esposo está a punto de salir. Le preguntaré si puedo contestar su teléfono.
Justo cuando terminó de hablar, la puerta del baño se abrió con un "clic".
Tras haberse dado una ducha fría, el hombre salió del baño envuelto en una toalla y ligeramente húmedo por todas partes.
Aún le goteaba agua de su cabello corto y mojado.
