—Nunca tuve la intención de hacer que rompieras. —Joanna estaba atónita, levantando la cabeza.
—¿Puedes aceptar esto?
—Linda sonrió, su sonrisa llevaba un toque de impotencia:
—Honestamente, no del todo. Pero, aunque no lo acepte, tú no firmarás conmigo. Por lo tanto, tengo que comprometerme.
—Joanna:
...
—No te pediré que rompas, pero hay una cosa que espero que puedas prometerme. —Linda se sentó derecha, su cara mostrando una expresión seria.
—Adelante.
—Podéis seguir saliendo, pero no quiero que vuestra vida amorosa sea pública. Ahora mismo no tienes fama, y eres solo una recién llegada. Si tu relación se hace pública antes de que tu carrera despegue, será muy desfavorable para tu futuro desarrollo. —Linda veía genuinamente potencial en Joanna.