—Gracias, mamá —Joanna Lawrence cogió el regalo y expresó educadamente su agradecimiento.
Lady Octavia ...
Le dolía el corazón.
Realmente le gustaba esa pulsera.
—A mi mamá le encanta esta pulsera, y siempre la lleva puesta —Ashton Heath miró la pulsera que sostenía Joanna y dijo sonriendo—. Tu piel es clara, te quedará muy bien el jade. Algún día te compraré un par de pendientes y un collar a juego, para que tengas un conjunto completo.
Su voz no era alta, pero tanto Lady Octavia como Rebecca Kelloway la escucharon.
Su propio hijo no la trataba con tanta atención, así que Lady Octavia sintió celos y se quejó:
—El dicho dice 'una vez que tienes esposa, te olvidas de tu madre', y es cierto. Siempre compras cosas para tu esposa, pero ¿cuándo has comprado algo para mí?
