—Ashton Heath rió—, ¿parezco que estoy bromeando?
—¡Ashton, eres tan amable! —Jeremy Lawrence se emocionó nuevamente, sin escatimar en halagos a su generoso cuñado—. No es de extrañar que Joanna se casara contigo. Es difícil encontrar a un hombre tan bueno. Mi hermana tiene mucha suerte de tener un esposo tan maravilloso como tú.
Ashton aceptó la adulación con gracia.
Pensó que su cuñado era comprensivo y muy elocuente.
Sin embargo, dar solo un coche pareció que no era suficiente.
Reflexionó un momento antes de preguntar:
— ¿Aparte de un coche, hay algo más que quieras?
Jeremy Lawrence se sobresaltó, una idea se le cruzó por la mente, lo que despertó su emoción:
— Ashton, ¿eres alguien con un estatus muy alto? ¿El tipo de persona que puede hacer cosas que las personas normales no pueden?
Antes de que Ashton pudiera decir algo, Zack, que estaba sentado en el asiento del conductor, se rió a carcajadas, respondiendo en su nombre:
