—Hmm. ¿No te gusta?
—Sí, sí, me gusta...
¿Pero se pueden regalar coches de lujo tan fácilmente?
Por lo que ahora sabía de su cuñado, probablemente no había un solo coche barato en su garaje.
Joanna también estaba asombrada y giró la cabeza para mirarlo. —¿Le vas a regalar un coche a Jeremy?
Ashton asintió.
—...Pero Jeremy no lo necesita —Joanna.
—¿Cómo puede no necesitarlo? —Ashton frunció los labios—. Tener un coche hace que todo sea más conveniente. Además, aunque no lo necesite ahora, no me impide regalárselo. Eventualmente lo necesitará.
Joanna. ...
¿Cómo es la experiencia de tener un esposo tan rico?
¿Regalando coches de lujo y relojes como si no fuera nada?
Regaló un reloj de varios millones de dólares en su primera reunión, ¿y ahora quiere regalar un coche?
¿Así es como la gente adinerada da regalos, siempre con tanta extravagancia?
—Pero, ¿no es un regalo demasiado valioso?
Ashton volvió a torcer los labios:
—Es solo un coche, no es tan valioso.
