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Los guerreros genéticos que habían sido empujados escaleras abajo eran sin duda los más afortunados. De hecho, ni siquiera resultarían gravemente heridos.
Lo único que había hecho en vano era subir las escaleras.
Yu Tian casualmente volvió a colocar el garrote de metal en su cintura y luego continuó saqueando granadas de los cadáveres de los guerreros genéticos.
Estas eran las armas que los guerreros genéticos usaban para enfrentarlo. Sentía que sería una buena elección devolverles las granadas a los guerreros genéticos.
En cuanto a las armas de fuego en manos de los guerreros genéticos, no eran de utilidad en este momento.
La potencia de estos fusiles no era suficiente para penetrar los chalecos antibalas de los guerreros genéticos. Por lo tanto, los guerreros genéticos no necesitaban preocuparse por herirse accidentalmente al disparar juntos.
Yu Tian ya no necesitaba enfrentarse a otros enemigos en este momento. Estos fusiles eran simplemente una carga para él.