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—¿Oh? ¿Está avanzando tan rápido? —Lucas tenía un atisbo de sorpresa en su rostro después de recibir la llamada de Roman.
Roman sonrió. —Hablando de eso, todo es gracias a tu ayuda. Has hecho tantas cosas por mí, mientras que yo solo me jactaba frente a ellos. Si ni siquiera pudiera hacer esto, ¿no te habría fallado a pesar de toda la confianza que tienes en mí?
Lucas sonrió. —Bien, voy a conseguir que alguien se encargue de inmediato.
Lucas colgó y luego hizo tres llamadas.
Una fue a Tyson, la segunda a Florence, y la tercera al subordinado de Lucas.
En ese momento, la reunión de los Huttons seguía en curso, y todos todavía parecían serios y sombríos. Intentaban averiguar cómo resolver la crisis que los Huttons estaban enfrentando. Pero no sabían que la crisis ya había sido resuelta después de que Luas hiciera algunas llamadas telefónicas.
