Tras la desaparición de Signora Jonsu se planteo informar a la policía, a lo cual Lucius se negó, el la vio desaparecer de manera extraña, si informaba a la policía sabía que la investigación podría ser ignorada por la forma irreal por como desapareció Signora o podrían tomarlos a ellos como responsables de la desaparición. Jonsu le propuso que los agentes de una de sus empresas se dedicarán a buscarla y Lucius aceptó pensando que era lo mejor.
Lucius seguía asistiendo a su prepa, no se sentía igual sin Signora, pero a nadie parecía importarle su compañía. Lucius con cada día que pasaba perdía la fe de encontrar a Signora; Jonsu por su parte se sentía mal por no poder decir nada al respecto, el sabía dónde estaba Signora, el esperaba que fuera lo suficientemente fuerte para adaptarse al ambiente tan hostil al que la había llevado.
Tras unos meses de la desaparición de Signora a Jonsu se le ocurrió que era hora del despertar de Lucius. Provocó un terremoto de alto nivel que causo un derrumbe en el bosque donde unas ruinas antiguas fueron descubiertas y en el mismo sitio un paso a una bóveda oculta en las profundidades de una cueva inmensa bajo la ciudad. Exploradores acudieron al lugar de los hechos e informaron a los medios de comunicación, pero uno tras otro salía despavorido del lugar afirmando qué las rocas se movían y que se escuchaban rugidos muy graves dentro de la cueva.
Jonsu estaba impaciente por la llegada de Lucius, para intentar relajarse preparo una comida especial y cuando Lucius llegó de la prepa cansado Jonsu lo recibió con la comida servida. -¿A qué se debe la especialidad? El inicio del fin del mundo supongo.- pregunto Lucius mientras miraba la comida con antojo. -Más o menos, tenemos que hablar.- Jonsu lo miraba con ansias, se sentó frente a el y empezó a comer. -Especificamente, ¿De que? No me gustan los rodeos, está poca madre la comida.- volvió a preguntar mientras se llenaba la boca de comida. -Tengo cosas que mostrarte, ya tienes la edad para aprender mucho más; deja de comer como un cerdo.- Contesto y tomo su cuchara sin apartarle la mirada. Lucius miro a Jonsu a través de sus lentes y le pregunto -¿No puedo saberlo ahora mismo? Y disculpa lo de la comida, pero es que te mamaste-. -Gracias, me esforcé; no es "cuando" te lo diga. Más bien es "Dónde" te lo diga.- contesto Jonsu alzando una ceja cambiando su mirada de forma intimidante. -Esta bien, ¿A dónde iremos?- pregunto Lucius. -¡Cállate y come!- Le contesto Jonsu perdiendo la paciencia de tantas preguntas y mirándolo con un mal gesto empezó a comer.
Tras haber terminado la hora de la comida Jonsu hizo esperar a Lucius en la sala mientras buscaba una caja con fotos, cartas y dibujos viejos, al encontrarla la llevo apresuradamente a la sala y tiro su contenido al suelo. Lucius miraba confundido a su abuelo, pensando se acomodo los lentes (se ve muy desesperado, el mae loco). -¿Viejo, que pasa?- pregunto y sin recibir respuesta se levantó del sillón. -Ten esta foto, anda- Jonsu tomo una foto del suelo y estiró su mano tambaleante a Lucius. Estaba firmada bajo el nombre de Edmun, Jonsu indico con un gesto de su mano que le pasará aquella foto. La foto mostraba una cúpula gigante con pilares y al pie de la foto unas coordenadas. -¿Donde queda eso? Pregunto Lucius mirando a la foto, Jonsu tomó la caja y levanto un libro del suelo; sin explicaciones guío a Lucius al sótano -Espera, esto será mejor con música-. Después de haber subido el volumen de la música en el amplificador se dirigió hasta la biblioteca, coloco el libro en una estantería y al jalarlo accionó una puerta secreta.
-¿Esto siempre estuvo aquí?- pregunto, pero otra vez no obtuvo respuesta, -¿Recuerdas tu cuento favorito?- mientras tenía sostenido el libro que había recogido, a lo que Lucius contesto -No, pero habían Reyes, y un montón de estupideces que no me acuerdo. Que gran ingenio tenías para los cuentos abuelo.- mientras seguía a su abuelo en la oscuridad del pasillo. -Gracias, hay muchas cosas que nunca te conté- Jonsu le entrego el libro a Lucius.
Lucius abrió el libro en una pajina al azar y empezó a leer en voz alta -Cuando El Hechicero Supremo pasaba por los pasillos más oscuros estos se iluminaban.- Jonsu empezó a notar la ausencia de luz y chasqueo los dedos, a lo largo del pasillo las antorchas se encendieron con una llama azul que iluminaba débilmente el pasillo. Lucius miro las antorchas incrédulo -Okey bueno, El Hechicero guió a través del caos al viajero del tiempo. Bueno la verdad me resulta sospechosa esta situación, pero pues ajá- Cuando llegaron al final del pasillo se encontraron enfrente de un pozo sin aparente final, -Madres. Bueno, fin del camino, ¿Regresamos?- Lucius se dio la vuelta y Jonsu lo jalo de regreso, chasqueo sus dedos y señaló al pozo. -Mira otra vez.- Lucius volteo y de la pared empezaron a salir escalones y antorchas que iluminaban debilmente el descenso.
Jonsu lo jalo del brazo para hacerlo bajar por las escaleras y al paso que bajaba más antorchas se encendían, -El lugar está muy sucio, si me sale una araña, grito.- comento Lucius y siguieron bajando hasta que se terminaron los escalones, -No vuelvo a subir, es un infierno bajar 500 mil escalones- Lucius miro su teléfono -Casi una hora bajando escalones, es una mamada-. Cuando alzó la mirada se encontró un salón oscuro, al encender su linterna vio todo lleno de telarañas, cajas, muebles grandes y cuadros en las paredes cubiertos por sábanas, ambos admiraban el lugar mientras tenían una pequeña conversación sobre lo empolvado que estaba el lugar. -¿Quieres ver un truco? Se llama prender la luz- Una llama se encendió en la mano de Jonsu y este dirigió su mano hacia al suelo y al tocarlo todas las antorchas se encendieron con una llama más brillante y fuerte. -¿Qué verga abuelo?, ay wey me salió mago- Contesto con un gesto de asombro y siguió caminando y explorando el lugar, incrédulo dudo de lo que pasaba y busco cámaras, micrófonos y cosas que pudieran delatar una broma.
-Tu, chamaco, ayúdame a abrir las puertas- pidió Jonsu a Lucius mientras miraba las gigantescas puertas del salón, -Eh, no se pase de riata- Lucius se tapo la cara frustrado y siguió la orden mientras pensaba que era lo que estaba pasando (ni pa' qué sea un sueño, ya me hubiera miado hace rato), despejó las puertas para jalar una de ellas, pero estás no se movían de su lugar, -¿Y si me ayudas tu a mi?- pregunto mientras jalaba con fuerza, Jonsu exhalo y se acerco -A veces me asombra lo estúpido que puedes ser- empujó la otra puerta abriéndola con facilidad mientras Lucius lo miraba asombrado e igual que el empujó la puerta hasta abrirla. Al terminar de abrir la puerta se colocó al lado de Jonsu y observo la gran oscuridad de un abismo, tan intensa y abrumadora que solo dejaba ver poco más allá de las puertas, el presentimiento de que algo allá afuera los estaba acechando invadió la mente de Lucius paralizando su cuerpo de miedo y alterando su respiración. Jonsu jalo a Lucius hacia atras y se paró al pie de las puertas, en el momento en el que piso el exterior de las puertas y extendió sus brazos como si abrazara al aire, la oscuridad del abismo empezó a disolverse adaptando una forma de humo y bruma que se dirigía hacía el rostro de Jonsu adentrandose en su cuerpo después de entrar por los orificios de su cara.
Lucius miraba atonito lo que hacía Jonsu (¿Qué estupefaciente me puso en la comida?) , su respiración agitada se aceleró haciendo que casi se desplome en el piso, trato de controlarse cerrando los ojos (¿Qué puta Mariguanada comí?, ¿Qué está pasando?) pensó Lucius mientras se alejaba en silencio y confundido en el suelo, a los pocos segundos sintió como una mano tomo su hombro, -Lucius, ¿Estás bien?, Hijo, reacciona por favor- Lucius abrió los ojos esperando ver algo peor, su miedo desapareció al ver a su abuelo, pero se veía cambiado, estaba más joven y se miraba más enérgico, -Abuelo, ¿Qué mierda hiciste?- Lucius se alejo rápidamente tratando de levantarse, -Magia- Le contesto sin más haciendo una pose satisfactoria, -Ah chingón, qué padre qué me saliste brujo- contesto sarcásticamente -¿Qué le paso a tu cuerpo? Ya no estas viejo-. Jonsu se acercó a él -Lo sé, mira esto- Tomo a Lucius de la mano y este se soltó y lo golpeó en la mano para apartarse de el, -No voy a ver una sola pendejada, deja tus chingaderas.- Jonsu lo miro y se acercó a él alegando que no pasaría nada malo, que el lo protegerá. Lucius cerró los ojos, se acomodo los lentes y decidió confiar bajo la presión que sentía, Jonsu lo posicionó en las puertas y lo hizo mirar hacia dónde hace unos minutos se encontraba dicha oscuridad, puso sus dedos en los laterales de la cabeza de Lucius y lo anclo a su mente.
-Imagina: Que todo ésto fue parte de una Potencia Regional y Global; este palacio fue habitado por los guardianes de esta ciudad, asesinos desalmados que defendían con su vida a lo que ahora son estas ruinas, ellos defendían sus tierras de ataques enemigos. La existencia de criaturas místicas y poderosas antes era posible, cada criatura inimaginable es posible que exista en el pasado, Los líderes de estas tierras eran poderosos, ricos y siempre estaban en constante batalla. Las bestias eran tan poderosas que saltaban varios metros y al rugir era cómo escuchar un magnífico trueno, Las batallas tan caóticas que se dieron aquí abajo, todas las vidas que terminaron sucumbiendo aquí y la historia de estos lugares son.. Ruinas.-
Lucius trato de apartarse -¡Suéltame pendejo, chupa mierda!-. Lucius logro soltarse de las manos de Jonsu saliendo del anclaje y se alejo lejos mientras miraba el lugar, alterado y confundido por el reflejo de sus lentes empezó a gritarle -No tengo nada que hacer aquí, tus cuentos de niños no son nada más que eso, cuentos. La existencia de estas runas solo significa que hubo una civilización aquí, nada más allá de lo normal.- Dijo Lucius mientras miraba aterrado a Jonsu, -Lucius, todo es real, no solo son cuentos. Se que es muy irreal y fantasioso pero es la verdad.- Jonsu se acercaba a Lucius a medida que trataba de convencerlo. -Tu madre no murió por causas naturales, tu padre tampoco, ambos murieron por un motivo mayor.- Jonsu trataba de convencerlo mientras se acercaba hacia Lucius -Entiendo que estés confundido, toda tu vida te oculte la verdad-.
-¿Cuál verdad? Puta madre abuelo, acéptalo, mis padres murieron. Varían murió en una misión contra el narco hace 10 años; Celeste, tu hija murió en un accidente aéreo. Aceptar que ya no están es lo mejor para nosotros, deja de fantasear o tendré que llevarte a un asilo.- Lucius retrocedía cada vez que Jonsu intentaba acercarse sin darse cuenta que atrás de él se encontraba una estatua enorme. -No Lucius, eres tú el que debe entender antes de que sea tarde. tu padre murió peleando por ti y tu madre se sacrifico por ti.- Jonsu se alteró y comenzó a levitar del suelo. Sus manos nuevamente se empezaron a iluminar y de sus ojos empezaba a emanar humo y pequeñas chispas y corrientes eléctricas de colores guinda.
-Puta madre viejo, ¿Que está pasando contigo?- pregunto Lucius y luego tomo una roca del suelo y se la arrojó a su abuelo quien la detuvo en el cielo y seguidamente la tiro como una bola de ardiente fuego qué al caer se disperso, las llamas llegaron a caer a los pies de Lucius haciendo que sus pies se quemara un poco. -¡Pendejo mis ojos, ¿Eso qué?!- empezó a sacudirse los pies para apagar el fuego y volteo a ver a su abuelo y tras frotar se los ojos por el deslumbrar vio a Jonsu levitando en el aire. -Tendrás que hacer algo más congruente y menos agresivo que intentar lastimarme.- Jonsu apuntó hacia atrás a la espalda de Lucius y este se dio la vuelta, al observar la estatua su mente empezó a desbloquear recuerdos, las pesadilla qué tenía de niño comenzaron a cobrar sentido y allí fue donde recordó uno de tantos sueños. -¿Señor Mejillón?.- Lucius cayó de rodillas mientras miraba la estatua del hombre, confundido y abrumado sonrió de manera burlona y esperanzada mientras intentaba retroceder sentado en las ruinas. Jonsu se acercó a dónde estaba Lucius y cuando estaba distraído con la estatua se acero hasta el escuchando lo que leía Lucius en aquella estatua, "Esclavo del Caos" era el título que describía al hombre de la estatua. -Lucius, ¿Lo conoces?- Jonsu se acercó paranoico y confundido.
-No, si, tal vez, no estoy seguro. Recuerdo que era un pirata, un vaquero, o un tipo de figura humanoide. Siempre se mostraba exactamente igual a como lo describe la estatua, abuelo.- Lucius se frotó la cabeza y busco con su mirada entre las ruinas, -¿Qué es este lugar?-.
-Esto es Nosti, o lo que queda de su sección subterránea, su líder era amable y quizás demasiado ingenua a la hora de enfrentarse a diferentes situaciones. Era una pacifista a la que no le gusta la violencia pero la odiaba aún más cuando se volvia necesaria. Cuando Nosti cayó en la arena y su esposo murió para protegerla de las criaturas, se convirtió en una vigilante y juró que protegería a cualquiera de repetir su destino hasta que ella cayera. Tras la Caída de Nosti, el continente se corrompió y una nueva utopía surgió de los escombros de Nosti.-
Las palabras de Jonsu captaron la atención de Lucius, mientras escuchaba la breve historia del lugar recorrió el lugar mirando las runas, no fue hasta que se apartó qué empezó a sentir miradas qué venían desde unas rocas, se quedo mirando y cuando se acercó para ver todo empezó a moverse. Las rocas empezaron a flotar y a chocar contra si mismas fusionandose entre ellas formando un golem; Lucius cayó al suelo de la impresión, el golem se había formado frente a el y al reaccionar salió corriendo gritando -¡SU PUTA MADRE!- Jonsu volteo a verlo, el golem siguió atrás de Lucius y cada que daba un paso el suelo se movía, sus extremidades rocosas crijyan y sacaban chispas al frotarse bruscamente, Lucius se puso atrás de Jonsu y al voltear el golem sostenía un trozo de escombros, al lanzarlo hacia ellos Jonsu formó un escudo mágico que se mostró impenetrable, los pedazos de escombro levitaron y Jonsu los disparo hacia la cabeza del golem para aturdirlo.
Lucius estaba en el suelo abrazando la pierna de su abuelo y mirando como el golem aun no se daba por vencido, -No se dormirá tan fácil, lo embrujamos para que defenderá este lugar incluso de nosotros, nos salió muy bien.- Jonsu tenía una gran sonrisa y poco a poco fue arrancando partes del golem para de nuevo arrojarlas a su cabeza. Lucius estaba perplejo, (¿Cómo es qué la roca se mueve?, ¿Cómo es qué tiene vida?) se preguntaba, -Yo lo creé, es como otro de mis hijos, tu madre no fue mi única creación. Así como este hay muchos más por el mundo ayudando en secreto a la humanidad, me da pena tener que dormir otra vez a Rocky.- después de mencionar esto Jonsu empujó con una corriente de viento al golem haciéndolo caer de espalda.
-¿Leíste mi mente?- pregunto Lucius levantándose del suelo, -No, no soy adivino, pero supuse que tendrías esa duda.- contesto Jonsu mientras se sacudía la ropa, tengo mucho que contarte y enseñarte- Jonsu camino hacia el salón otra vez y Lucius lo siguió corriendo, -¿También podré hacer esas cosas?- pregunto curioso y confundido -No, aún no. No es como hacer un pastel, bueno un poco si; la cosa es que es complejo y si no tienes el poder ni el carácter todo lo que hagas se saldrá de control y no podrás detenerlo.-
-¿Siempre fuiste un brujo? Eso quiere decir qué también existen otras cosas, ¿Verdad?- pregunto apuntó de entrar, parado a los pies de la puerta Jonsu se detuvo -Te explicaré todo, primero habrá que subir- dijo señalando las escaleras y desapareció. [Hijo de perra, me dejo aquí abajo..] pensó Lucius y en seguida se acercó a las escaleras intentando subir corriendo. Pasarón los minutos y los escalones no parecían acabar, esa escalera en círculos se hacía infinita a medida que Lucius subía y cada vez que miraba había atrás se bajoneaba. Persistío en el camino a pesar de que ya parecía eterno y las horas parecían días. Lucius cansado empezó a detenerse y sentirse mareado, era extraño lo que sentía; al tomar su cabeza y centrar la vista vio como una mano salió de la oscuridad de las escaleras para tomarle del torso y jalarlo hasta el final de las escaleras.
Al llegar la mano lo dejo caer al suelo y Lucius se levantó de golpe -¡Puto, mis lentes!- después de limpiarse los lentes y acomodarse la playera salió corriendo hasta donde estaba Jonsu, éste se encontraba en la cocina preparando un café muy cargado. Lucius tomo un cuchillo y lo puso en el cuello de Jonsu -Dime, ¿Qué tipo de cosas son las que puedes hacer? Dime absolutamente todo lo que este relacionado con mis papás y el señor Mejillón-, Jonsu tragó saliva y se quedó quieto y levanto las manos aún sosteniendo la taza -Todo lo que imagines, todo eso y mucho más-, Lucius aflojó el cuchillo y Jonsu se apareció de repente atrás de Lucius, sentado en el sillón de la sala. -¿Te vas a quedar ahí parado?- le pregunto y la reacción de Lucius fue lanzar el cuchillo hacia su abuelo y este sin voltear detuvo al cuchillo en el aire, -puto, pudiste detener el cuchillo como si nada, ¿Qué hay sobre Mejillón?- Lucius se acercó y tomo el cuchillo del mango. -Otra vez, soy brujo más no adivino; no se quien es Mejillón, no se de donde viene, ni siquiera se por que hay una estatua de el en Nosti.- Jonsu le dio un trago a su café y seguido salió una mueca de su cara -Muy amargo, me pase. De verdad no se quien es Mejillón, en las fotos no aparece, en el cuento nunca lo mencione, he vivido varias veces esa época y nunca lo escuché.- empezó a mover su café, confundido y con la boca amarga pensó que Mejillón podría ser el nombre que Lucius adoptaría en ese tiempo, una sonrisa se dibujo en su cara.
-¿Qué paso con mis padres?- preguntó Lucius incandose frente a el sosteniendo el cuchillo. -Varián, es complicado, digamos que está dormido.- Jonsu movió la cabeza tomando su café -¿Qué quieres decir? O sea, ¿Solo tuve qué despertarlo desde hace 10 años para que despertará?- Lucius lo miro confundido y enojado. -No, no es tan fácil, si está muerto, pero puede volver a la vida.- explico Jonsu haciendo desaparecer el cuchillo de la mano de Lucius. -Oye no seas mierda, bueno, ¿Cómo puede despertar?- Jonsu lo miro entre el sorbo de su café -Reconstruye su cuerpo, carne, hueso, sangre y alma, bueno lo de alma está más complicado.- Lucius se levantó y se sentó frente a él -¿Por?-.
-Porque tú papá no tiene alma, bueno si, es un espectro.- Lucius se levantó repentinamente del sillón -¡¿Qué?!-. -So, ajajaj, no ya. Tu papá es complicado, un hombre de negocios. Su palabra siemore se cumple. Por eso acepté qué se casara con tu mamá, era un hombre de palabra-. Lucius se puso a dar vueltas pensando, -Bueno, y de mi mamá, ¿Que hay sobre ella? ¿También puede "Despertar"?- Lucius se acercó a su abuelo y lo miró esperanzado. -No- Jonsu suspiro sintiendo el pecho vacío cambiando la expresión de su cara -Me encantaría que fuera así, pero ella no está dormida, si está muerta.- Lucius movió los ojos -¿Y no la puedes revivir?- volvió a preguntar. -No, no puedo; ni a ella, ni a la abuela Idalia, ni a mis hermanas, ni a mis amigos, ni a nadie.- Jonsu se enrojecio del coraje -No puedo hacer eso, sacar a uno es sacar a todos y si saco a uno, no habrá ser capaz de salvarnos.- cambio su gesto tratando de relajarse.
-Mañana mismo te enseñaré magia, por si tenías la duda.- Jonsu se levantó del sillón -Justo es lo que pensaba; brujo, si sabes leer mentes, cabrón- Lucius saco cosas de la nevera. -No, solo era obvio que lo preguntarías. Me voy a dormir- Jonsu subió a su cuarto, Lucius se cocino, comió e igual se fue a su cuarto.
Al entrar a su cuarto se agobio al ver el desorden del lugar, empezó a limpiar y recoger sus cosas y entre su ropa encontró una bolsa, su contenido contenía un porro, una foto y una carta que decía "no abrir hasta tus 18", todo dejado por Signora. Lucius prendio el porro y bajo el efecto de la hierva empezó a unir cabos y encontró al culpable de la desaparición.