No me había puesto pensar en mi papá, ni en mis hermanos, mi mamá seguramente estaría muy feliz de saber que su hija encontró el amor en un hombre que ella conocía de toda la vida; pero mi papá y mis hermanos eran otro tema aparte.
-¡Mi papá!
-¿No pensaste en ellos?
-No.
-Tu papá va a matar a Josh.
-Mis hermanos lo van a matar.
-Pues mucha suerte con eso.
-Nina hay otra cosa que quisiera pedirte.
-Sí dime.
-Quisiera que seas tú quien me ayude a organizar la boda; conociendo a mi mamá y a la mamá de Josh van a querer ver avances de la boda en cuanto sepan que estamos comprometidos.
-¿Quieres que haga planeaciones para hoy?
-No.
-¡Ah bueno!
-Para el sábado.
-¿El sábado? Claire, el sábado tenemos una boda.
-¿Este sábado?
-Sí.
-¿Estás segura?
-Muy segura.
-¿Por qué se me olvidó?
-Quizás porque estuviste muy poco presente en este evento por cubrir la boda de ayer.
-¡Se me olvidó por completo!
-Descuida, puedo encargarme de este evento, es pequeño.
-¡Gracias! Te prometo que es la última vez que olvido un evento.
-Tranquila, está bien; hoy en la noche empiezo a hacer lo de tu boda.
-¡Gracias amiga!
-Ya vete a arreglar, ponte algo que combine con esa piedra enorme que traes en el dedo.
JOSH
Fui a mi apartamento a cambiarme de ropa y ponerme algo más formal para ir a hablar con mis futuros suegros. Pedí comida española para llevar a la casa de los padres de Claire ya que su madre era Española y su padre Americano, pase por la comida antes de llegar por Claire y después fuimos a su casa, bueno a casa de sus padres.
-¿En serio tenías que comprar comida?
-Es para mis suegros.
-¿Recuerdas que mis padres te conocen desde que usabas pañales?
-Claire estoy nervioso.
-Yo también lo estoy, sabes que no pararan de hacer preguntas… No sé si voy a poder mentirles con algo tan grande a mis padres.
-Bueno yo le mentí a mi abuela y sabes que me importa más que mis padres.
-Lo sé.
…
Cuando llegamos a la entrada de la casa los nervios me estaban consumiendo, veía a Claire tan tranquila que no me lo creía.
-Finges bien para estar tan nerviosa.
-Ya estamos aquí ¿Qué podemos hacer?
-Vamos entonces.
Ambos bajamos de coche y entramos a la casa, la mamá de Claire está a en la cocina y su papá en el jardín con sus hermanos mayores.
-Hola mamá.
-Hola mi amor, bienvenida.
-Gracias.
-Hola Susan.
-Hola Josh, bienvenido; tiempo sin verte.
-Sí, mucho tiempo.
-¿Quieres tomar algo?
-Agua está bien.
-Claire me dijo que vendrías así que prepare agua de frutas, tú favorita si no mal recuerdo.
-Tu agua de frutas es deliciosa.
-¿Por qué cuando vengo a visitarte no preparas mis cosas favoritas?
-Porque eres mi hija; tu deber es visitar a tus padres.
-Aquí tienes Josh.
-Gracias.
-Claire.
-Sí.
-¿Y ese anillo? Es de compromiso.
-… Mamá.
-¡Hermanita!
-¡Hola Milo!
-Que gusto que estes aquí.
-Bueno yo vengo a ver a nuestros padres todos los fines de semana… ¿Recuerdas a Josh?
-Sí por supuesto.
-¿Qué hay de nuevo?
-Hola.
-Mamá, Milo, debo hablar con toda la familia, debemos.
-¿Qué pasa hija?
-¿Podrías decirle a papá y a Mick que vengan?
-Sí, claro.
No podíamos esperar más tiempo, la mamá de Claire ya había visto el anillo de compromiso y si seguía preguntado las cosas se iban a poner difíciles con los hermanos de Claire.
Milo el hermano mayor de Claire llamó a su padre y a Mick, sentía cómo el corazón me latía a mil por segundo en el pecho, pero ya estábamos allí y no podíamos echarnos para atras.
-Mamá, papá; hermanos… Quería que las cosas fueran distintas, como saben en mis planes de vida nunca estuvo formar una familia. Pero en los últimos meses Josh y yo estuvimos saliendo y…
-¿¡Sales con mi hermana!?
-¡Eh! Sí.
-¿Cómo puedes soportarla?
-Claire es una mujer increíble, es buena persona, inteligente, divertida, además de que es muy hermosa y cuando se enoja frunce el ceño como un pequeño cerdito…
-¡Disculpa!
-Lo ves.
-¡Yo no!
-Sí Lo haces hermana.
-…
-Bueno el punto es que Josh y yo estamos saliendo y además nos comprometimos… ¡Nos vamos a casar!
El silencio invadió la habitación en un segundo, la mirada desconcertada de todos era la mism; sin expresión alguna de ninguno de los presentes los nervios y crecían cada vez más dentro de mí.
-¿No van a decir nada?
-… Claire, hermanita ¡Felicidades!
-¿No estás molesto Mick?
-¡No! Claire desde que eran niños sabíamos que había algo entre ustedes.