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—¡Hay tantos genios! —Tanto el joven con ruedas doradas en los ojos como Su Jin'er tenían expresiones graves después de la batalla; cuatro enemigos del último grupo que encontraron eran tan fuertes como ellos. Sumando a los que habían conocido antes, sentían que había al menos una docena de concursantes tan fuertes como ellos.
Todavía pensaban que muy pocas personas eran como Su Ping, pero luego se dieron cuenta de que el universo era verdaderamente demasiado grande. Eran muy especiales, llenos hasta el tope de secretos, pero otras personas estaban en condiciones similares.
Linghu Jian, Emperador Dragón, la Santa Dama de las Mil Hojas y los otros descansaban actualmente con el corazón abrumado. Su mayor recompensa de la batalla era que su orgullo se había ido por completo, sintiéndose como principiantes ignorantes; con miedo de todo otra vez.
