Continente del Trueno Retumbante
En una enorme montaña en lo profundo del Bosque Tronador.
Muchos Dragones Atronadores del Vasto Cielo se habían reunido. Algunos volaban sobre la montaña y otros habían aterrizado en la cima.
Había un lago profundo en la cima. La mitad del lago estaba llena de sangre.
Un dragón estaba agazapado frente al enorme lago; su cuerpo estaba completamente atado con cadenas e impalado con afiladas uñas negras, lo que le hacía imposible moverse.
Junto al fuerte Dragón Atronador del Vasto Cielo había una larga serpiente blanca. Sus escamas blancas estaban manchadas de sangre, y también estaba clavada al suelo.
De un antiguo dragón surgió una voz intimidante, fría y despiadada.
—Vienes de una especie inferior, y aún así sedujiste a uno de los nuestros e intentaste tener un hijo. ¡Eso es punible con la muerte!
—¡Mátenlos! —gritó una voz.
—¡Mátenlos! —se unió otro.
—¡Mátenlos! —rugieron en coro los demás.
