—Su Ping…
—Mo Fengping guardó ese nombre en su memoria.
—Sabía que Han Yuxiang tenía razón. Al menos, no pensaba que pudiera olvidar jamás a esa persona intimidante.
—Un guerrero de mascotas de batalla titulado de menos de 24 años. Así que, tiene la misma edad que los estudiantes… —Mo Fengping murmuró para sí mismo.
…
—Señor…
—Xu Kuang fue otro testigo perplejo. De repente, sintió que algo despertaba en su interior.
—Pensó que Su Ping era su igual la primera vez que lo conoció.
—A medida que Su Ping mostraba cada vez más sus habilidades, Xu Kuang sentía que la brecha se ampliaba y estaba más que dispuesto a llamar a Su Ping su maestro.
—A medida que pasaba el tiempo, lentamente comenzó a tratar a Su Ping como a un mayor.
—Pero allí, justo entonces, se dio cuenta una vez más de que Su Ping tenía su misma edad.
—Su Ping era un maestro a quien reconocía.