—¡Eso estuvo cerca!
—¿De dónde salió ella?
—No creo que esa chica sea de nuestro continente, y no puede ser una guerrera legendaria de mascotas de batalla de otro continente. ¿Es ella... de la federación extraterrestre?
—Yuan Tianchen estaba aterrado por esos pensamientos. Si ella fuera una guerrera que vino de otro planeta que era parte de la federación, ¿qué estaba tratando de lograr al venir al planeta azul? ¿O podría esta chica ser una oficial asignada secretamente por el gobierno federal para monitorear el planeta azul?
—Cualquier opción era una buena noticia para él.
—Lo que más le aterraba no era la chica en sí, sino cómo el joven la trataba.
—¡Esa chica no era ni el más mínimo más débil que él, pero tenía que escuchar sus órdenes!
