Los dos Reales lo observaban con expresiones desagradables. El nivel de poder de Noah no tenía sentido y ni siquiera podían empezar a evaluar su verdadero poder de batalla.
Noah era solo un cultivador de rango 5 máximo en teoría, pero sus ataques podían amenazar defensas capaces de bloquear a potencias en la etapa de gas máximo. Eso era irreal para los estándares del mundo del cultivo.
Los Reales podían entender que si Noah usara su energía superior para expresar una destreza superior a su nivel actual. Sin embargo, Noah solo confiaba en sus manos desnudas para lanzar esos ataques.
Había solo una explicación para ese poder. Noah había comenzado a recorrer el camino para convertirse en una ley, incluso si su dantian no evolucionaba al siguiente nivel.
En cuanto a cuánto poder podía ejercer su individualidad, los Reales no podían predecirlo. Habían entrado en contacto con su existencia, y eso había demostrado que su potencial superaba al de su Padre.