Noah y los demás se retiraron cuando vieron al masivo titán arrojar la segunda montaña hacia el Demonio Devastador. Finalmente podían escapar ahora que el Demoniaco Perseguidor había llegado.
En cuanto a quién ganaría esa batalla, no había duda en la mente de los activos de la Colmena. El Demonio Devastador era sólo un cultivador de rango 6 recién avanzado al cual incluso algunos expertos de quinto rango habían logrado golpear. Por otro lado, el Demoniaco Perseguidor había vivido por más de un siglo como una potencia.
El Patriarca de la Colmena incluso poseía la marioneta divina recuperada en la dimensión separada de Shandal. El hecho de que había alcanzado el sexto rango por sí solo era también prueba de su talento superior.