Noah tomó el libro y lo inspeccionó.
Dentro, estaba la descripción de todos los procedimientos que Ivor pasó para crear su cuchillo.
—Creación de espadas con el método de forja elemental.
Tan pronto como leyó el título, sin embargo, volvió la cabeza para mirar a Ivor y sonrió incómodamente.
—¿No tienes algo que describa cómo forjar sables? No me interesan mucho las espadas.
Los ojos de Ivor se ensancharon y tomó un largo sorbo de su jarra antes de resoplar y reprender a su estudiante.
—¡¿A quién le importa el nombre que le des a algo?! Si un trozo de madera puede cortar un árbol, ¡entonces es una espada! Si estiras tus dedos y los usas para cortar a un hombre, ¡entonces tus dedos son una espada! ¡No te obsesiones con cosas inútiles y recuerda que es el núcleo del objeto lo que importa, su forma externa puede ser lo que tú quieras!
Noah todavía no creía completamente en las palabras de Ivor.
