—¡Volvamos! —dijo Fu Hang.
Lin Tao siguió a Fu Hang hacia fuera. Había estado en coma durante cinco años, pero no era tonta. Las palabras de Shen Yan le hicieron entender claramente que su hermana también estaba enamorada del Hermano Hang.
Cuando Fu Hang guió a Lin Tao hacia afuera, los periodistas los rodearon instantáneamente.
—Presidente Fu, ¿puedo preguntar si esta joven es su antigua amante?
—Presidente Fu, ¿por qué no se casó con esta joven en aquel entonces?
—Presidente Fu, ¿no estabas cerca de la Joven Maestra Mayor? ¿Podría ser que ya no tienes intención de quedarte con ella?
…
El cuerpo de Lin Tao tembló involuntariamente. No estaba desesperada porque Fu Hang se hubiera casado con Shen Yan. Simplemente, no esperaba que su querida hermana realmente…
Fu Hang pidió a Lin Nan que abriera paso, y se fue primero con Lin Tao.
Tampoco se molestó en echar un vistazo a Lin Xing desde el principio hasta el final.
