—Viejo Maestro Fu, estoy segura de que ha visto lo mal que me han insultado hoy en internet! —exclamó Shen Yan.
El Viejo Maestro Fu la miró de reojo y frunció el ceño ligeramente, diciendo sin expresión —Shen Yan, uno tiene que aprender a aceptar su castigo cuando hace algo mal. Esta situación fue tu culpa desde el principio. Solo puedes aceptarlo y aprender de tus errores. Espero que no vuelvas a hacer nada mal en el futuro.
Fu Xiaoxiao se sentó junto al Viejo Maestro Fu con aire triunfante. Sabía que el abuelo definitivamente estaría de su lado. Así, levantó la cabeza y miró a Shen Yan con arrogancia, como si estuviera mirando con desprecio a Shen Yan.
Shen Yan observó en silencio sus expresiones. La sonrisa en su rostro se apagó ligeramente —Ya que el Viejo Maestro Fu dice eso, creo que esta situación será fácil de resolver.