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Estas eran todas familias que estaban en buenos términos con el señor Huang. ¿Por qué estaban todas aquí en la Mansión Imperial? Wei Ling no comprendió por un momento y bajó la voz para preguntarle —¿...podría ser hoy el cumpleaños del señor Huang?
No había escuchado ninguna noticia sobre el cumpleaños del señor Huang previamente, pero con tantas personas reunidas aquí, no pudo evitar pensar en esta dirección.
—No lo sé —Shen Jingyan no podía adivinar qué estaba pasando. Él era más pragmático. Solo pensó por un momento antes de mirar hacia arriba y decirles a los dos:
— El señor Huang y los demás están en el segundo piso. Ya que nos hemos encontrado con ellos, bajemos a saludarlos.
Su pensamiento optimista era evidente. Dijo a Wei Ling y Qiao Chen con una voz profunda y poderosa —Si el señor Huang y los demás no están celebrando su cumpleaños, los invitaremos de nuevo y veremos si están dispuestos a subir a comer algo.
