Gideon comenzó a ver el pasado, como si fuera un sueño que parpadeaba ante sus ojos. Y este pasado, a medida que seguía observando, se dio cuenta de que no era suyo. Esa recopilación de sucesos no le pertenecía. Era de ella... de Leah. Fue con esta realización que se sintió desconcertado. ¿Por qué? ¿Por qué estaba viendo el pasado de Leah en este momento? ¿No estaba obteniendo su vínculo de apareamiento con Vera? Entonces, ¿por qué estaba viendo el pasado relacionado con Leah?
La culpa se elevó dentro de él nuevamente y esta vez, se estrelló contra él, mucho más fuerte que antes. Aunque había decidido que dejaría su pasado atrás, para avanzar y dejar a Leah como parte de su pasado, no pudo evitar verse afectado cuando sucedía algo así. El hecho de que estuviera viendo el pasado de Leah y no el de su compañera lo sumió en una completa confusión tanto de su mente como de su corazón.