Zolan y Luc vieron cómo la determinación se mostraba en el rostro de Evie. Adivinaron que los pensamientos que ocupaban actualmente la mente de la princesa estarían de alguna manera relacionados con sus habilidades únicas y lo que había planeado para este viaje al corazón de las tierras prohibidas.
Zolan se recuperó primero antes que Luc. —¡Ahora sal de ahí y vete a vestir! —Zolan le gritó al otro vampiro que todavía estaba de pie en el arroyo cuando simplemente se quedó allí mirando, como si todavía intentara salir de cierta experiencia mágica.
Avergonzado, Luc salió inmediatamente de las aguas y dejó a Zolan y Evie junto al arroyo que fluía.
—Por cierto, Zolan... —Evie comenzó mientras sumergía su mano en el agua de nuevo—. Ese... gigantesco orco... Oí a alguien decir que no era como nada que hayas encontrado antes. ¿Significa esto que es la primera vez que ves tal criatura aquí?
