—¿Vamos a dejar que se vayan así nomás? —frunció el ceño levemente Zhou Tianming.
—¿Qué otra cosa podemos hacer? ¿Dejarlos aquí para continuar la guerra con nosotros? —Zhou Fight sacudió la cabeza—. Estos monstruos de la Niebla Escarlata que escaparon son la verdadera fuerza principal del ejército escarlata. Si nos enfrentamos a ellos, solo sufriremos pérdidas.
—Destruir esos 100 Imperios Escarlata de alto nivel es suficiente para nosotros.
—Déjalos ir.
—Todos vinieron del Gran Cosmos Carmesí. Deberían estar volviendo ahora. No se quedarán en el alto continente. No nos afectará.
Zhou Tianming asintió.
Entonces se volvieron para mirar el campo de batalla.
Los soldados y Espíritus de Dios del Imperio del Sol Ardiente estaban regresando a la Nave Madre Eterna de manera ordenada.