—Entonces, ahora puedes recordar lo que hizo Wallace en el Pabellón de Cristal ese día, ¿verdad? —La voz de Sharon fue muy calmada.
—¡Te mataré! ¡P*ta, eres una p*ta! ¿Crees que te dejaré ir así como así? Déjame decirte, una p*ta sin vergüenza como tú ni siquiera es digna de lamer mis pies. ¡Debes morir! —Los ojos de Zón parecían escupir fuego, y su cuerpo entero temblaba inconscientemente. Deseaba poder apresurarse y devorar a Sharon vivo.
Sharon reaccionó de manera anormalmente fría. Dijo directamente:
—¿Qué pasó exactamente ese día? ¿Por qué mi madre se despertó en la casa de un hombre extraño? ¿Todavía no quieres decírmelo?
El corazón de Zón estaba lleno de odio por Sharon. La miró ferozmente, su intención de matar aumentaba. ¡Ojalá pudiera desgarrar a Sharon en pedazos ahora mismo!