"El lugar entero estaba en silencio.
Dominic Lowe miró esta escena impactado y apresuradamente dijo:
—¡Rey del Norte, no deben ser asesinados!
—¿Por qué no?
Westley Hader preguntó con una sonrisa.
Tristan Yandell resopló.
—Hace poco, incapacitamos a toda la gente yin-yang en las tres provincias de las llanuras centrales. Si quieren empezar una guerra, ¡el ejército del norte luchará!
El ejército del norte nunca había temido a la gente yin-yang.
Braydon sostenía los cuellos de Griffin Wilson y Chester Salo, sus ojos fríos y sin emoción.
—¿Por qué no podían matar a los dos reyes del infierno?
¡Braydon incluso se atrevió a matar a uno de los ministros de las veinticuatro divisiones!
¡Por no hablar de una simple persona yin-yang!
Los ministros de las veinticuatro divisiones tenían una alta posición y gran poder.
Como todos sabían, las veinticuatro divisiones estaban a cargo del país, cada una cargando con una gran responsabilidad.
