¡Podía contar el número de parientes que tenía!
En la tercera generación de la familia Neal, además de Braydon Neal, solo quedaba la pequeña Ginny.
Braydon solo tenía una hermana y nunca permitiría que le sucediera un accidente.
Hubo un breve silencio.
—Tía cuarta, no estés triste. Encontraré una manera de curar la enfermedad de Ginny —dijo Braydon con calma.
—Braydon, ¿realmente puedes salvarlo? Después de todo, Ginny padece una enfermedad terminal, yo...
Qahira Sage no pudo dejar de llorar.
Debido a Liam Neal, desde que Ginny Neal nació, sufrió mucho a su lado, haciendo que Qahira se sintiera como si le debiera a su hija.
—Braydon —suspiró Liam—, ¡algunas enfermedades no pueden ser curadas ni siquiera por médicos nacionales!
—Braydon, he llevado a Ginny a ver a médicos famosos. Todos dijeron que Ginny no vivirá más allá de los siete años.
Qahira sollozó ahogada y no pudo continuar.