Lilly había sido encargada por su padre de obtener la mayor cantidad de información posible del hombre. Al principio, pensaron que el hombre podría estar relacionado con la plaga sombra y eso era una gran preocupación para el reino si ya habían logrado infiltrarse tan lejos.
—Puedes llamarme Vercy —dijo el hombre encadenado.
—Está bien, Vercy —respondió Lilly—. ¿Por qué has venido a Delberg?
—Para matarlos a todos —dijo Vercy.
—Es inútil —dijo el guardia—. El hombre no dirá nada sobre la verdadera razón por la que está aquí.
—El demonio dentro de mí me ha concedido un poder ilimitado y quería probarlo en la primera ciudad que vi, esto resultó serlo. Una vez que me deshaga de ustedes por dentro, la plaga sombra puede entrar y encargarse de su supuesto Ser divino.