Chereads / Renací como un vampiro en otro mundo capaz de controlar la mente / Chapter 20 - Capítulo 20 – Una noche ajetreada parte 4 (R-18)

Chapter 20 - Capítulo 20 – Una noche ajetreada parte 4 (R-18)

En el instante en que encontré su punto más sensible entre sus delicados pétalos rosas dejó de reír. Su espalda se arqueo y sus muslos apretaron mi rostro. 

Estaba siendo asfixiado por sus suaves muslos mientras me comía su coño por completo. Esta mujer era muy sensual para mí. Cada segundo que pasaba con ella mi corazón latía más fuerte y rápido.

El corazón de Olivia y el mío se sincronizaron en un punto desconocido. Mis pensamientos estaban completamente enfocados en hacer memorable esta noche para ella. 

Finalmente, ya no pude aguantar más por lo que rocé la punta de mi pene en la entrada a su húmedo agujero que ya goteaba sus jugos de amor. La punta al instante quedó completamente lubricada por lo que moví mi cadera suavemente introduciendo mi polla lo más despacio posible. 

-  ¡Ah! ~

Podía sentir la resistencia de su himen y como se iba rompiendo poco a poco. Olivia había empezado a soltar gemidos. Gracias a eso supe que el afrodisiaco de mi mordida podía remplazar cualquier sentimiento en placer. 

Realicé el último empujón causando que mi polla perforara completamente su coño. Lagrimas caían por el rostro de Olivia, pero ni ella misma sabia el porqué. Los sentimientos de dolor, arrepentimiento o enojo no estaban. Debería de sentirse agraviada ya que la estaba violando, pero en su lugar lucia extasiada.

Sin esperar nada mi cadera se movió rítmicamente haciendo que mi polla embistiera la entrada de su útero múltiples veces. 

Ya estaba cansado de hacer el misionero en todos mis encuentros sexuales. Aun así, continuaba en esta posición ya que es la más optima cuando uno toma la virginidad de una mujer. Tiene mayor impacto visual y emocional al ver las reacciones de mi pareja.

Debía de admitir que la sensación de su coño era increíblemente suave. Incluso se adaptó inmediatamente a la forma de mi polla. De sus reacciones pude inferir que estaba tocando todos sus puntos sensibles cada vez que la envestía.

-  ¡HYA! ¡AH! ¡No puedo! ¡Ah! ¡Se siente muy bien! ~ 

Sin dudarlo más aumente mi velocidad lentamente. Olivia era una virgen hasta hace poco por lo que decidí acostumbrar a su cuerpo lentamente a las nuevas sensaciones. 

La sangre de Olivia y Doménica habían teñido una gran porción de las sábanas. El olor resultante me embriagaba completamente.

Mi pene incluso estaba palpitando dentro del interior del coño de Olivia y una sensación refrescante me había envuelto. 

Este sentimiento no se sentía tan mal fue lo que pensé. Olivia no se quedó quieta y comenzó a recorrer mi cuerpo con sus suaves y delicadas manos. Tocó mis pectorales y abdominales mientras soltaba gemidos. Ella estaba curiosa por mi cuerpo. 

Era el primer hombre para ella y posiblemente el único que ha estado así de cerca de ella. Era normal que sintiera ese tipo de curiosidad. Pero sentía que este no era el momento para eso. 

Aunque terminó de tocar todo mi pecho ella giró su rostro entendiendo lo que había hecho. Estaba avergonzada y sus brazos intentaron ocultar sus pechos que no paraban de rebotar. 

Su coño estaba empapado haciendo ruidos muy lascivos con cada embestida. Si tuviera un medidor de placer ya estuviera hasta el tope. Quería soltar mi carga espesa y plantar mi semilla dentro de su fértil vientre. 

Estaba tan cerca de mi limité. Decidido a algo que ni yo entendía moví mi mano y giré suavemente su rostro hacia mí. Sus ojos verdes esquivaban mi mirada negándose a encontrarse en la misma línea de visión. Pero su curiosidad era mucho más potente encontrándose ocasionalmente conmigo.

No sabía por qué la quería y por qué la traté diferente a las demás. Cuando lo hice con Camila y Doménica fui brusco buscando el placer de mí mismo antes que el de ellas. Sin embargo, con Camila era diferente lo que la hizo sentir cálida y amada.

Ella sabía que no debía sentirse así. En este preciso momento estaba pagando por un crimen que cometió voluntariamente. Lo peor era que ni siquiera se sentía como un castigo para ella, lo peor era que había sido capturada por un monstruo desconocido. A pesar de eso sintió que esto no era tan malo. 

Ahora tendría un techo, comida y alguien que la aprecie. Este hombre lucía malo por fuera, pero era algo cálido.

Los ojos de Olivia se rindieron y con determinación miró mi rostro. Una sonrisa se dibujó en su rostro mientras lagrimas caían por su mejilla. Finalmente, sus labios se abrieron y dijo.

-  Me gustas ~

Inmediatamente me abrazó y forzó a un tierno beso. Esa frase me impacto mucho más profundo de lo que creí haciéndome alcanzar el orgasmo más fuerte que he sentido hasta el momento. 

Mi pene soltó una carga espesa que llenó por completo el útero de Olivia pintándolo y marcándolo como mío. 

-  ¡MMMMMMMMMM! ~

Aun con nuestros labios ocupados los gemidos de Olivia eran claros para mí. Ella también se había corrido y su abrazo finalmente se debilitó. Cayó profundamente al instante.

La somnolencia me estaba invadiendo repentinamente. Mis parpados se sentían pesados por alguna extraña razón. Me recosté en la cama junto a Olivia abrazándola fuertemente. 

No sabía porque me sentía así si era un vampiro que no requería dormir. Pero este sentimiento de cansancio sentía que no venía de mi cuerpo. Era algo mucho más profundo.