Una puerta en medio del vacío, el cual no es más que lo profundo de la mente, los sonidos detrás de ella dicen más que su aspecto sombrío, el frío que se siente a su alrededor, la soledad, las ganas de girar la chapa seducen a quienes están dispuestos a conocer sus demonios internos pero ¿cómo saber si son reales o no? Un susurro los llama, a algunos los frena el miedo, a otros les atrae lo desconocido pero sólo uno conocerá la verdad.
El resplandor en las esquinas del marco de la puerta divide la realidad de la ficción, la magia de la ciencia y la locura de la cordura, a sólo un paso se encuentra la respuesta.
Seis personas, seis almas, seis mentes, seis corazones que han perdido la fé, perecido ante la tentación, las mismas que están en busca de comprobar si Dios existe, si el diablo es real.
Un objetivo los une, muchas razones los separan, tan diferentes e iguales a la vez, si son semejantes al creador entonces el mismo rey del infierno sería capaz de derrotarlo pero Dios sólo piensa en eso, en la eterna lucha del bien contra el mal, él no piensa en cómo se siente un demonio.
Nada es coincidencia y si ahora se ha presentado la oportunidad de obtener un alma, entonces es momento de que la maldad entre en acción.
La puerta no tiene seguro, en cualquier momento alguien podría abrirla y cruzar al otro lado, los seis la están viendo, es un llamado dentro de un sueño y pronto despertarán.