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—Es porque el Líder de la Secta de la Nube es demasiado fuerte —explicó urgentemente una deidad—. Incluso si lo intentamos con todas nuestras fuerzas, solo logramos cortar un doppelganger formado por la Piedra Divina.
—¡Un mero líder de la Secta de la Nube os ha derrotado a todos, si no sois basura, qué sois! —rugió con ira la montaña nevada, y todo el Plano Norte vibró.
Varios reyes deidad temblaron, sin atreverse a hacer un sonido.
Después de un corto tiempo, la montaña nevada habló fríamente:
—De ahora en adelante, eres el cuarto rey deidad del Plano Norte. ¿Estás dispuesto?
Dudley Lynch dudó por un momento y luego dijo rápidamente:
—Como un junior, estoy más que dispuesto, ¡es mi honor!
—Bien. El Plano Norte siempre ha tenido cuatro reyes deidad, y esta tradición no puede cambiar —dijo la montaña nevada fríamente.
Dudley no pudo evitar sentirse encantado en el fondo de su ser. Nunca imaginó que en realidad se convertiría en el cuarto rey deidad.
