Al cruzar sus miradas, Kenneth Minnx rápidamente caminó hacia Ethan Smith.
—¿Eres Ethan Smith? —Kenneth Minnx examinó a Ethan de arriba a abajo.
Ethan asintió:
—Sí.
Sin más palabras, Kenneth Minnx simplemente preguntó:
—¿Cuándo empezamos la operación?
—Cuanto antes, mejor —respondió Ethan.
Para Ethan, cada segundo importaba.
Después de un momento de silencio, Kenneth Minnx dijo:
—Actuaremos esta noche, tú lideras el camino.
—De acuerdo —aceptó Ethan de inmediato.
Luego, Ethan planeó llevar a Kenneth Minnx de vuelta a su casa.
Pero Kenneth Minnx negó con la cabeza y dijo:
—Aún tengo algo que resolver, te contactaré esta noche.
Dejando esas palabras, Kenneth Minnx se dio la vuelta y se fue.
Al ver la figura que se alejaba de Kenneth Minnx, Ethan pensó por un momento y luego lo siguió silenciosamente.
...
Cuando llegó el mediodía, Ethan finalmente volvió a su casa.
El hombre con el bigote preguntó:
—¿Cómo fue?
Ethan tomó un sorbo de agua y se burló: