Esta voz era de origen desconocido, al parecer utilizando algún tipo de técnica.
El rostro de Randall Freeman se ensombreció, y gritó:
—¿Quién está ahí siendo sigiloso y tramando? ¡Muéstrate!
—Randall Freeman, si quieres ir y morir, hazlo por ti mismo. ¡No nos arrastres a nosotros también! —La voz fría sonó de nuevo.
—Qué aterrador es un oponente Denton Horton. Ni tú ni Gregory Hum pueden vencerlo, ¡y menos nosotros!
Randall Freeman no pudo evitar decir fríamente:
—Si unimos fuerzas, quizás haya un atisbo de esperanza.
—¿Unir fuerzas? —Randall Freeman, ¿debería llamarte estúpido o ingenuo? A tal nivel, ¿podemos ganar confiando en números? Si la brecha entre nosotros y Denton Horton no fuera tan grande, los números podrían ser útiles. Pero en esta situación, solo estaríamos enviándonos a la muerte —dijo la voz fríamente.
Randall Freeman se enfureció inmediatamente, y apretó los dientes y maldijo: