La mano de Ethan Smith sujetaba firmemente la de Emily Taylor.
Emily se sobresaltó. Se dio la vuelta rápidamente y miró a Ethan.
En ese momento, Ethan luchaba por abrir los ojos, esbozando una sonrisa.
—Realmente viniste... —murmuró Ethan suavemente con la boca abierta.
Ignorando la obstrucción, Emily regresó rápidamente al lado de Ethan.
Ella sostuvo la palma de Ethan con ambas manos, susurrando:
—Te dije que, mientras aplastaras el Colgante de Jade, definitivamente volvería por ti.
—Señorita, debemos volver de inmediato. Si el jefe de la familia se entera de que nos escapamos, tendremos problemas —recordó alguien desde atrás.
Pero Emily no prestó atención, aún sosteniendo firmemente la mano de Ethan.
—Señorita, si el jefe de la familia se entera, podría ocasionarle problemas a él —advirtió de nuevo alguien.
Al escuchar estas palabras, la expresión de Emily se volvió ligeramente antinatural.
Tratando de mantener una sonrisa, susurró:
