—¿Quién... quién eres tú? —El rostro del joven se llenó al instante de horror.
Solo la presión ya los forzaba a arrodillarse, lo que era suficiente para demostrar que el hombre ante ellos estaba muy por encima de lo que imaginaban.
Ethan Smith dijo indiferente:
—Mi nombre es Ethan Smith.
—¿Ethan Smith? —Al oír este nombre, todos en el barco retrocedieron varios pasos.
—¿Hm? Parece que soy bastante conocido en la Secta Halcroen —dijo Ethan Smith indiferentemente.
El joven se puso aún más nervioso. Temblaba al decir:
—Señor Smith... los asuntos de la Secta Halcroen no tienen nada que ver con nosotros, usted... por favor no nos mate, accederemos a cualquier cosa que diga...
Ethan Smith se paró con las manos detrás de él y dijo:
—Quédate tranquilo, no soy alguien que mata sin discernimiento, siempre y cuando me lleven de vuelta a Pyro.
—¡No hay problema, absolutamente ningún problema! —El joven respondió apresuradamente.
Ethan Smith retiró su aura y preguntó:
