Wei Canglong y los otros tres no podían escapar aunque quisieran. ¡Solo pudieron condensar una Barrera de Qi Verdadero para resistir la ola de fuego!
¡Sin embargo, lo que los aterrorizaba era que no podían resistirlo en absoluto!
«Ahhhh...»
¡Las llamas quemaban sus cuerpos locamente, haciéndolos gritar de dolor!
En este momento...
¡El área donde estaban Wei Canglong y los otros tres parecía haberse convertido en un purgatorio!
¡Este era un purgatorio sin ninguna posibilidad de supervivencia!
Wei Canglong hizo circular el Qi Verdadero en su cuerpo al límite y soltó un rugido
—¡Dragón Azul Aullando al Cielo! —rugió.
—¡Rugir, rugir, rugir! —los siete dragones dorado-verdes se condensaron en forma y rugieron en todas direcciones.
—¡Entierro de Relámpagos de Tigre Blanco! —Lu Canyang también desató completamente el Qi Verdadero en su cuerpo.
¡Los siete tigres gigantes color platino cargaron hacia adelante con feroz relámpago!
