—¡Su rugido atravesó el cielo mientras su cuerpo se lanzaba hacia adelante como un cohete!
—¡Entonces, el puño que contenía un poder infinito se estrelló en el enorme hacha!
—¡Puño contra hacha!
Esta escena sorprendió a todos, y todos pensaron que Ye Chen se había vuelto loco. Incluso un cultivador de refinamiento corporal no se atrevería a hacer algo así. Además, ¡la Secta del Hacha Ling era famosa por su fuerza! Cuando el anciano vio las acciones de Ye Chen, rugió aún más enojado.
—¡Pequeño bastardo, mataste a mi discípulo! —gritó—. ¡Ya que es así, usaré tu vida para apaciguarlo!
—¡Bang! Una monstruosa onda de choque barrió en todas direcciones.
Por un momento, el tiempo pareció detenerse, y el espacio pareció congelarse.
Sin embargo, cuando ese breve descanso terminó, ¡de alguna manera Ye Chen aún estaba vivo!
¿Cómo fue esto posible?